Los ayuntamientos de Errenteria y Astigarraga han solicitado la anulación de los acuerdos del consistorio de Hernani para implantar el sistema de recogida de residuos puerta a puerta en un recurso que han interpuesto ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de Donostia, según informaron agencias.

Los recurrentes argumentan que el Ayuntamiento de Hernani, gobernado por la izquierda abertzale, «invade» las competencias de la Mancomunidad de San Marcos, y argumentan incluso que su decisión «producirá la dilapidación de fondos públicos por la duplicidad de in- fraestructuras».

El consistorio de Errenteria está gobernado por el PSE y el de Astigarraga tiene un alcalde de Hamaikabat, dos partidos que tratan de impedir la extensión de este sistema implantado ya con éxito en Usurbil y validado recientemente por el voto de la mayoría de los vecinos.

Los dos consistorios citados han pedido al juzgado que hasta que dicte una resolución, suspenda cautelarmente el acuerdo de la corporación hernaniarra.

En un comunicado, acusan a Hernani de «poner en riesgo» el servicio de gestión de residuos del resto de municipios de la Mancomunidad «al generar importantes costes añadidos a los ya comprometidos en el marco del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa», al que pertenece.

También contra San Marcos

Critican además a la Presidencia de San Marcos, cuyo titular es Ricardo Ortega (EB) por «permitir» iniciativas que «atacan la estructura de la gestión» acordada por los ayuntamientos y por «incumplir» los acuerdos de la mancomunidad.

Las corporaciones de Errenteria y Astigarraga añaden que los ayuntamientos, la mancomunidad y el Consorcio de Residuos han repartido sus capacidades de gestión para completar un servicio integral de gestión de residuos. Insisten por ello en que el acuerdo de Hernani «ataca de raíz la propia estructura de la mancomunidad».