La patronal CEOE consideró ayer que la propuesta sobre la reforma laboral del Gobierno español «es insuficiente y un tanto ambigua ante los grandes problemas que afectan a la economía española», a pesar de que abarata el coste para las empresas de los despidos de los trabajadores.

En un comunicado recogido por Efe, la CEOE señaló que le parece adecuado que el Ejecutivo asuma la necesidad de acometer reformas en la línea formulada por su organización, «y otras instituciones como el Banco de España, la Comisión Europea o la OCDE».

Reconoció que en el documento gubernamental hay medidas defendidas por la CEOE pero matizó que «no están incluidas o debidamente reflejadas» como la flexibilidad interna de las empresas, la equiparación de las cotizaciones sociales con la media europea y la reducción del absentismo laboral.

En la misma situación, halló otras peticiones de la patronal como un contrato de trabajo a tiempo parcial más flexible, un contrato de formación para jóvenes o la colaboración en la intermediación laboral de las ETT.

Además, incide en que el documento hace referencia a la introducción de «rigideces» a algunas modalidades de contratos que «son esenciales para algunos sectores y que habría que evitar». La CEOE dio que que los empresarios harían «un ejercicio de responsabilidad», para «seguir dialogando» y alcanzar acuerdos «con contenidos ambiciosos».

El presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, expresó también estas críticas en el Fórum Europa al considerar la reforma «bastante ambigua y no concreta nada» y advirtió de que los empresarios seguirán «poniendo encima de la mesa aquellos temas que ponemos desde hace dos años y que consideramos imprescindibles»

Negó que el Gobierno o la patronal propongan abaratar el coste del despido, pese a que la medida que Madrid ha incluido va en este sentido. «Hay que interpretarlo adecuadamente», afirmó, asegurando que prima que «se respeten los derechos de los trabajadores tengan el contrato que tengan y para ello, proponemos nuevos contratos mejores de los que hasta ahora existen». El presidente de CEOE no espera un acuerdo antes de finales de mayo.

Corbacho habla de otro modelo

También el ministro español de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ante las críticas recibidas por la propuesta del Gobierno, quiso negar que implique un abaratamiento del despido y afirmó que «supone tomar medidas transitorias hasta que se llegue a un modelo laboral alternativo al actual».

Explicó que no se trata de «mimetizar» el modelo austríaco o alemán, sino de aportar al debate las experiencias de otros países donde la crisis no ha tenido los mismos efectos sobre el empleo que en el Estado español. Sin embargo, el ministro matizó que el peso industrial de Alemania es superior al español, por lo que, a su juicio, el recorte del horario laboral de ese país «no se puede utilizar» en igual medida.