El presidente Barack Obama anunció el jueves que EEUU tiene el objetivo de colocar astronautas en la órbita de Marte hacia 2035, esforzándose de este modo en convencer a los numerosos críticos de que su visión de la exploración espacial tiene fundamentos sólidos.

«Pensamos que para 2025 una nueva nave espacial nos permitirá por primera vez emprender misiones habitadas más allá de Luna en las profundidades del espacio», declaró en el Centro Espacial Kennedy, cerca de Cabo Cañaveral (Florida), adonde acudió para presentar sus planes para la conquista del espacio.

«Comenzaremos así a enviar astronautas hacia un asteroide por primera vez en la historia y para mediados de los años 2030 pienso que podremos colocar hombres en la órbita de Marte y regresar con seguridad a la Tierra antes de posarnos en Marte», añadió.

Obama lanzó un jarro de agua fría al Congreso y a la comunidad espacial anulando en febrero el programa Constellation para volver a la Luna antes de iniciar la conquista de Marte.

Los detractores de Obama, entre los que se encuentra Neil Armstrong, el primer hombre que pisó la Luna en 1969, le han acusado de renunciar a medio siglo de supremacía estadounidense en el espacio.

«No estamos ya en una carrera para lograr un único objetivo como posarnos en la Luna», destacó Obama. «Lo que fue una competición mundial hace tiempo que se convirtió en una cooperación global», insistió.

«Deberíamos intentar volver a la Luna como estaba previsto», dijo Obama. «Sobre este asunto tengo que decir claramente que ya hemos estado y que Buzz [Aldrin] ha estado», prosiguió.

Buzz Aldrin, el segundo hombre que pisó el suelo lunar, es un ferviente defensor de la nueva estrategia espacial de Obama y le acompañó el jueves en el Centro Kennedy.

Apoyándose en las conclusiones de una comisión independiente de expertos creada por él mismo al comienzo de su Presidencia, Obama volvió a destacar que el programa Constellation tiene escasa financiación y marcha con retraso.

Asimismo, añadió que su nueva política incluye el reforzamiento del desarrollo de lanzaderas comerciales para trans- portar al menor coste posible astronautas estadounidenses a la Estación Espacial Internacional creando 2.500 empleos.