Juanjo BASTERRA

El futuro de la comercialización de la leche provocó un intenso debate en Bilbo en una jornada organizada por el Colegio de Veterinarios de Bizkaia entre EHNE-COAG y la industria láctea representada por cooperativas Kaiku, la zamorana Gaza y la cordobesa Valle de los Pedroches (COVAP), que colaboran con la vasca con sede en Urnieta. El sindicato ENBA se mostró a favor del modelo intensivo y cuasi monopolista que el Gobierno de Gasteiz instauró durante décadas atrás «porque no hay otro camino para el ganadero», aunque ha provocado la desaparición masiva de explotaciones lácteas en una década.

Ese camino que emprendió el Ejecutivo de Lakua tuvo un beneficiario como fue la industria impulsada desde Iparlat, un modelo que EHNE cuestionó de forma directa. porque ha generado el deterioro casi irreversible del sector de vacuno de leche y reclamó un nuevo modelo productivo, pegado a la tierra y a quienes la trabajan, sean agricultores o ganaderos, pero siempre alejada de los intereses de la industria láctea «que hunde al sector productor, como se está demostrando en pocos años». En este caso, el viceconsejero de Agricultura del Gobierno autonómico, José Luis Anda, al cierre del encuentro, apostó por iniciar una reflexión sobre el modelo productivo y la necesidad de cambio, y apostó por iniciativas de venta directa. Esa declaración de intenciones dejó una buena impresión entre los asistentes, aunque tendrá que verse en la práctica cómo se plasma.

Porque, de hecho, Andoni García, representante de EHNE y COAG, recordó que Kaiku «quiere dejar de recoger la leche de los ganaderos que han entrado en procesos de venta directa de leche a través de máquinas expendedoras». Jon Agirre, vicepresidente de Kaiku cooperativa, dijo que el consejo rector «no ha decidido eso». La realidad es que, según informa el diario digital de EHNE de Bizkaia «Baserri bizia», la decisión se ha aplazado un año, porque intervino el viceconsejero Anda. «Es una aberración que todavía esta industria láctea mantenga su rémora histórica de arremeter contra toda iniciativa directa», precisa EHNE Bizkaia.

Liberalización del sector

Todo esto ocurre a las puertas de la nueva Política Agraria Común (PAC). A partir del 1 de abril de 2015, se liberaliza el sector y las cuotas lácteas desaparecerán, como explicó Miguel Angel Díaz Yubero, director general de la Cooperativa Ganadera del Valle de los Pedroches (COVAP), ex responsable de Pascual y ex responsable del ministerio español de Agricultura, entre otros muchos cargos. Como dijo, ese nueva arquitectura liberalizada provocará un incremento del 10% de la producción y una bajada del 15% de los precios en el Estado español, aunque en la Unión Europea la caída será de un 10%, como máximo.

Conllevará deslocalizaciones de productoras, porque el coste de alimentación del bovino es mayor en otros países de la UE. Afirmó que todavía no está claro si existirá un mecanismo de apoyo alternativo a los ganaderos para que puedan resistir ante la bajada consecutiva de los precios de la leche, pero Andoni García, de EHNE-COAG, apostilló que «hace falta un control de la producción más allá de 2015, como fija la PAC, porque si no no habrá futuro».

Francisco Luis Dehesa, presidente del Consejo Vasco de Veterinarios y del Colegio de veterinarios de Bizkaia, reconoció que el futuro del sector primario vasco «está condicionado» y, por lo tanto, «también el de los veterinarios. Si no lo paramos entre todos, seremos un objeto decorativo: caseríos, ganaderos y veterinarios», precisó.

El encuentro estuvo concurrido. En el mismo, el viceconsejero de Agricultura del Gobierno de Lakua, José Luis Anda, indicó que, entre otras actuaciones, en breve se va a lanzar una campaña para fomentar el consumo de leche. Andoni García, representante de EHNE y COAG, fue crítico y realista con la situación por la que atraviesa el sector.

En una década, según esta organización agraria, el modelo «productivista e intensivo» que se ha desarrollado en Hego Euskal Herria ha provocado la desaparición del 80% de las explotaciones lácteas. «Quedan menos de 800 explotaciones, las cuales, sin embargo, han visto crecer espectacularmente su producción, de una media de 15 a 20 vacas se ha pasado a una media de 80 a 100 vacas, con una cuota media muy alta. En Nafarroa, llega a los 600.000 litros por explotación», según el análisis de EHNE. En este sentido, Miguel Angel Díaz Yubero recordó que desde 1986 a 2009 en el Estado español se ha pasado de 200.000 explotaciones ganaderas a 22.000, y reconoció que para 2015 se reducirán a 18.000 explotaciones ganaderas del sector lácteo.

«Reconversión brutal»

Andoni García precisó, en referencia a las explotaciones lácteas vascas, que desde 2002 la caída se ha acelerado, ya que se ha reducido en un 64% en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y en Nafarroa bajó en un 48%. Para el representante de EHNE, «es una reconversión brutal». A su juicio, «pagamos las consecuencias de las políticas y medidas equivocadas por las administraciones públicas y de la industria láctea, sea o no cooperativa», porque, según dijo el responsable del sector lácteo de EHNE y de COAG, «no hay diferencias entre las industrias lácteas, sean o no cooperativas», porque «el modelo ha fracasado y, sobre todo, lo peor es que no se quiere realizar una reflexión de fondo de que estas políticas productivistas e intensivas del pasado reciente son las responsable de este deterioro casi irreversible, como no se emprenda otro camino».

Acusó de forma directa, en presencia de la industria representada por Kaiku, Gaza y COVAP, a la industria láctea de «ser responsable de esta reconversión y concentración del sector» y al Gobierno del Estado español de «abandonar a los ganaderos infligiendo un castigo mayor a los ganaderos pequeños pagándoles menos compensaciones».

Andoni García criticó la apuesta de la leche de larga duración, conocida por UHT, «porque supone un contrasentido del sector ganadero, porque nos sitúa en una mayor debilidad ante la leche importada. La leche más barata es la de menos valor añadido». Los representantes de la industria láctea justificaron esa situación porque «es una realidad que la han impuesto los consumidores», aunque bien es verdad que se ha producido por una falta de incentivación del consumo de calidad. Pero la entrada de esa leche de larga duración, se acompañó, según el representante de EHNE, de «la destrucción del mercado de la leche pasteurizada o leche de día. Nuestras empresas desde Beyena a Gurelesa, Kaiku e Iparlat despreciaron ese mercado, pero muchos países de la UE lo conservan. Tienen una ventaja más sobre nosotros. Nos han vendido a los ganaderos por un sistema de gran distribución de leche más barato, porque los costes de producción de un litro se encuentran en 35 céntimos de euro para el ganadero, según el Ministerio español, pero la gran distribución paga entre 28 y 30 céntimos. Eso genera una crisis que se acentuará en los próximos años, porque están vendiendo leche por debajo de su coste real».

Entrada de cisternas

En este caso, Díaz Yubero aportó el dato de que en 2009 entraron cisternas del resto de la UE, sobre todo del Estado francés, con entre 400.000 y 500.000 toneladas de leche y más de 300.000 toneladas de leche envasada. El Estado español, como se analizó en el encuentro celebrado en Bilbo, produce 300.000 toneladas menos que la cuota que tiene fijada de más de 6,1 millones de toneladas, pero es deficitario porque «consume tres millones más que la producción», que son las que llegan de fuera «en forma de leche, de productos lácteos o de queso. Con este último nos han invadido los holandeses y franceses en un sector que nosotros no hemos intervenido. Tenemos que unirnos y protegernos».

Mikel Arteaga, responsable de ENBA en Gipuzkoa, se posicionó a favor de la corporación Kaiku en todos sus extremos y recordó que el 98% de los productores guipuzcoanos trabaja para esa corporación. «Es inevitable. Es la forma que tenemos de comercializar la leche. Nuestra industria, con aciertos o no, ofrece productos de mayor valor añadido y hace partícipes a sus socios» que, en realidad cada vez tienen un papel menos importante dentro de la compañía. Una 43% está en manos de la suiza Emmi, por ejemplo.

Ante la perspectiva difícil que EHNE y COAG anunciaron, Arteaga aseguró que «sin ganaderos igual nos quedaremos, pero porque nuestros hijos no quieren hacer el relevo generacional». Destacó que en 2009 «fue uno de los peores años contables en las explotaciones ganaderas» y adelantó que «los primeros meses de 2010 han empezado peor».

Jon Agirre, de Kaiku, aseguró que la compañía facturó 60 millones en 2009, menos que un año antes y destacó la buena posición en el mercado y el acuerdo con Mercadona para vender leche de la línea blanca en sus centros comerciales.

José Luis Calvo Rosón, de Gaza, recordó que impulsan desde Zamora la calidad en un mercado «difícil y saturado».