Igor Antón acabó cuarto la Flecha Valona tras demostrar en los últimos kilómetros que atraviesa un gran momento de forma que le llevó a marcharse del pelotón a ocho kilómetros de meta detrás de Kolobnev, Frank Schleck y Kreuziger y a atacar en el inicio del muro final de Huy, en cuya cima fue superado por Evans, Rodríguez y Contador.

El australiano manifestaba tras lograr su primer triunfo desde el Mundial que había necesitado media docena de participaciones para darse cuenta de que en todas las anteriores se había equivocado de táctica. A diferencia de la Amstel, en la que se mostró muy activo, el líder del BMC estuvo todo el día escondido en el pelotón y sólo apareció en los últimos 150 metros para superar a Antón y Contador, que habían obtenido una distancia sobre los demás al subir a un ritmo demasiado exigente, marcado siempre por el del Euskaltel, que les dejó sin opciones ante el ataque final de Evans y Rodríguez, que supieron dosificar mejor las fuerzas.

Si Antón no se hubiera escapado a falta de ocho kilómetros y se hubiese limitado a seguir el ritmo de los demás, quizás habría cumplido con su objetivo de lograr el podio e incluso de ganar, porque demostró tener unas piernas muy buenas, como las que le llevaron a ganar en El Morredero la semana pasada. Pero si Evans ha tenido que estrellarse seis veces con la dureza del muro de Huy para conocer su secreto y lograr su primera victoria, sólo se puede aplaudir la valentía de Igor Antón y de todo el Euskaltel, que entró con tres corredores en cabeza al último kilómetro, en el que atacó Klöden. Entonces arrancó Antón y sólo pudo seguirle Contador, que se limitó a aguantar su rueda hasta que fue superado por Evans y Purito.

Ataque de Kreuziger y Frank

No fue Antón el único que se movió antes de la última subida a Huy. En la penúltima, a 30 de meta, Andy Schleck hizo la selección del pelotón y en la bajada se marchó su hermano con Kreuziger, Ten Dam y Loosli, último superviviente de la fuga del día junto a Palumbo (Acqua), Champion (AG2R), Gourgue (Landbouwkrediet) y Augé (Cofidis), que se mantuvo en cabeza hasta esa subida. El cuarteto tirado por Frank Schleck y Kreuziger sólo fue neutralizado a tres de meta cuando atacó Kolobnev. Tras el que saltó Igor Antón, aunque luego prefirió esperar para lanzar su ofensiva en Huy.