Joaquín Caparrós prepara la visita a Osasuna con un quebradero de cabeza poco habitual. Casi novedoso, porque en más de ocho meses de competición es sólo la segunda vez en que busca un lateral derecho. Pegado al once como el escudo a la camiseta, Andoni Iraola se perderá el lunes su segundo partido de la temporada, después de que viera su quinta cartulina amarilla en el partido ante el Zaragoza.

Encabezando el empolvado plan B, aparecen Carlos Gurpegi y Ustaritz. El primero ejerce habitualmente de comodín y se ha encargado, de hecho, de defender el lateral diestro en los pocos minutos que se ha perdido Andoni Iraola hasta ahora. Poco más de cien en Liga, competición en la que no ha podido terminar dos partidos, en ambos casos por problemas físicos.

En la 17ª jornada, tuvo que abandonar el césped de La Rosaleda con problemas estomacales -después se descubrió que sufría una hernia de hiato-: David López saltó al campo y Gurpegi retrasó su posición para acabar el choque en el lateral. Operación similar a la que realizó Caparrós en Gijón, en la 26ª jornada. Iraola se retiró antes de la media hora, como consecuencia de una tendinopatía en el hombro, y el técnico lo sustituyó esta vez por Markel Susaeta, para que Gurpegi volviera a retrasar su posición.

La otra ausencia del guipuzcoano, esta vez conocida de antemano como sucede ahora, se produjo en el último encuentro de la fase de grupos de la Europa League, cuando el Werder Bremen visitó San Mamés. Fue Xabi Etxeita quien se hizo con el puesto entonces, aunque esta opción, con el zornotzarra cedido en el Cartagena, queda lógicamente descartada para El Sadar. Lo mismo sucede, en este caso por lesión, con Iban Zubiaurre, que sustituyó a Iraola en el último cuarto de hora del choque europeo frente al Austria, cuando el partido estaba decidido y Caparrós decidió dar minutos a los jugadores menos habituales.

Así que el segundo recurso hay que buscarlo en los amistosos. Y de ahí sale el nombre de Ustaritz, que el mes pasado actuó de inicio en el lateral derecho en el amistoso que enfrentó a Athletic y Paraguay.

Mirando a Lezama, con Eneko Bóveda lesionado y el Bilbao Athletic necesitado de todos sus jugadores, sólo parece saltar el nombre de Jonás Ramalho, que en los últimos meses ha desaparecido de los titulares de prensa y que ya no desbancará a Iker Muniain como récordman precoz, pero que sigue trabajando regularmente con el primer equipo. Sin embargo, un ambiente tan caliente como el del derbi y la presión que conlleva la pelea clasificatoria del equipo rojiblanco no parecen las circunstancias idóneas para el debut de un chaval de 16 años.

Las quinielas, en principio, apuntan a Gurpegi, que ayer reconoció haber acabado «contento» cuando le ha tocado ocupar el puesto y se muestra dispuesto a repetir experiencia.