El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, se reunió ayer con el presidente de la Cámara de Diputados, Gianfranco Fini, en el marco de una reunión de la Ejecutiva del partido, PdL, en un intento de zanjar la crisis.

Il Cavaliere rechazó la pretensión de Fini de crear una corriente interna e insistió en la necesidad de mantener unido el partido, que, recordó, en dos años de vida, ha ganado todas las elecciones.

Fini exige que se permitan los debates internos y mayor atención a los problemas del sur de Italia. Y es que las tensiones Berlusconi-Fini han conocido un repunte tras el triunfo de los aliados de la Liga Norte en las recientes regionales.

Fini integró en abril de 2008 su partido, AN (heredero del neofascista MS) en el PdL.