El año pasado visitó Euskal Herria con el espectáculo «Varekai», y este año el Cirque du Soleil aterriza en Donostia para presentar «Saltimbanco», un evento de luz, acrobacias y color que pretende ser «como la evolución de un ser humano» tras su llegada al mundo. Así lo explicó en su día el director artístico del espectáculo, Bruce Mather, ante los medios de comunicación.

Los 50 artistas que participan en el espectáculo «Saltimbanco», estrenado en 1992 por primera vez, contarán al público asistente una historia similar a «la evolución del ser humano». «Entramos tímidos en el mundo para poco a poco coger confianza», señaló el director artístico, quien destacó las posibilidades que ofrece a la compañía el viajar sin su tradicional carpa, ya que pueden «visitar más ciudades únicamente por unos días».

La compañía canadiense, con base en Montreal y dirigida por Franco Dragone, llenará Donostia con una mezcla de «luz, música y acrobacias» interpretadas por el medio centenar de artistas de 21 nacionalidades que participan en el espectáculo. «Saltimbanco» lleva en escena desde 1992 y desde entonces cerca de once millones de personas han podido disfrutar del show, que visitó 75 ciudades de los cinco continentes con un total de 5.000 actuaciones.

Los artistas que integran el Cirque du Soleil deben pasar antes de ingresar unas duras pruebas de admisión. «Con los artistas somos muy exigentes desde el principio», indicó Bruce Mather, quien señaló que la mayor parte de los integrantes se consiguen a través de la página web y pasan un periodo previo de entre seis y ocho meses de formación en el estudio de Montreal. Con un ritmo elevado de actuaciones, sobre todo en los casos en los que no montan la carpa, los artistas visitan «una ciudad por semana» y disponen de dos semanas de vacaciones cada 10 meses de trabajo.