La mayoría sindical en la Enseñanza Pública convoca huelga para el día 25
STEE-EILAS, LAB y ELA , que conforman la mayoría sindical en el sector de la Enseñanza Pública, han convocado huelga para el próximo 25 de mayo para impedir los recortes que el Gobierno de Patxi López quiere practicar en detrimento de las condiciones laborales y de la calidad de la enseñanza. Antes, el día 13, realizarán asambleas en todos los centros educativos y el 20 de mayo realizarán concentraciones. Piden al Departamento de Educación un cambio de rumbo.
Juanjo BASTERRA |
La mayoría sindical, conformada por STEE-EILAS, LAB y ELA, en el sector de la enseñanza pública no universitaria de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa llaman a 20.000 profesores a la huelga para el día 25 de mayo para reclamar mejores condiciones laborales y reforzar la escuela pública y para frenar las medidas de imposición de la consejera de Educación, Isabel Celaá. 200.000 alumnos podrían quedarse sin clases lectivas, según anunciaron los sindicatos.
El próximo miércoles los tres sindicatos han convocado asambleas en todos los centros de enseñanza para analizar la situación y el día 20 de mayo realizarán concentraciones de protesta, previas a la huelga del día 25. Ese día hay convocadas manifestaciones. STEE-EILAS, LAB y ELA señalaron ayer en rueda de prensa que hasta esa fecha esperan que haya una oferta del Gobierno de Patxi López que satisfaga las demandas sindicales de la mayoría para «replantearnos la huelga», pero reconocieron al unísono que «las expectativas para que se produzca son muy pocas». En este sentido, explicaron que CCOO y UGT se muestran favorables a los recortes que plantea Celaá y los métodos de imposición que ha puesto en marcha «sin consultar a los representantes de los empleados de la enseñanza pública».
Belén Arrondo (STEE-EILAS), Txetxu Rojo (LAB) y Kepa Altuna (ELA) alertaron de que el Gobierno de Lakua plantea el recorte presupuestario, lo que significará una pérdida de condiciones laborales adquiridas con anterioridad y el recorte de las plantillas. Arrondo afirmó que el Departamento de Educación «no tiene intención de trabajar por un acuerdo amplio en el sector del profesorado, o al menos, no con estos sindicatos que son mayoría, ni busca mejorar la calidad de la escuela pública, para mejorar el servicio y la calidad de la escuela pública, para poder trabajar de manera más sosegada y tranquila y en mejores condiciones», sino que, como criticó Kepa Altuna, pone la disculpa de la crisis para llevar adelante recortes «en vez de equipararnos al gasto que se produce en la enseñanza pública europea, lo que significaría destinar al año más de 300 millones más». Txetxu Rojo añadió en este caso que el Gobierno de Patxi López ha puesto a la enseñanza pública «como punta de lanza de los recortes del sector público. Eso tendrá una correspondencia con una pérdida en la calidad del servicio». Explicó que los recortes «no tienen sentido», porque cada año «se incorporan 300 nuevos grupos por el crecimiento demográfico, pero se quiere atender con el mismo número de personas, lo que es ilógico y redundará en un empeoramiento de la enseñanza».
También explicó que elevarán el número de alumnos por aula y eliminarán las sustituciones de una semana, por lo que «se evitarán 16.000 sustituciones que se producen al año y 6.000 puestos de interinos no se cubrirán, lo que elevarán la carga del profesorado».
En este sentido, no se equipararán las condiciones laborales y salariales de los sustitutos, que se precarizarán, y esas plazas se adjudicarán por medio de un proceso informático «que no conocemos ni es transparente», precisó el sindicalista.
Los representantes de las tres centrales sindicales que conforman casi el 70% de la representatividad del sector de la enseñanza pública no universitaria explicaron que desde que comenzó el proceso de negociación del convenio, en ninguna de las reuniones mantenidas «ha materializado una verdadera negociación, porque la administración no ha dado ningún paso encaminado a lograr un acuerdo con los sindicatos, sino que ha apostado por medidas regresivas, de imposición y explicándonos que sólo es posible la vía de los recortes, que no aceptamos de ninguna de las maneras». Por que entiende, además, que el Departamento de Educación se niega, incluso, a poner en marcha medidas aprobadas en el anterior convenio, que fue suscrito por la minoría de CCOO y UGT.
Belén Arrondo explicó que el Departamento de Educación, que dirige Isabel Celaá, «sólo nos ha puesto encima de la mesa el camino de la imposición. No ha contado con los representantes sindicales a la hora de llevar adelante proyectos como el de Eskola 2.0, el sistema curricular, el marco trilingüe, la presencia de las víctimas en las aulas, etc. Es la vía de la imposición la que ha emprendido y, desde luego, tenemos que cambiar esa dinámica de la imposición». Por eso, la representante de STEE-EILAS recordó que el Gobierno de Patxi López tiene que hacer «un esfuerzo y una reflexión para que ponga encima de la mesa acciones que vayan hacia la mejora de la enseñanza, porque la mayoría del sector no acepta lo realizado hasta el momento y lo único que conlleva es mayor carga de trabajo para el profesorado». Juanjo BASTERRA
