Un brutal impacto costó la vida a dos personas en la mañana de ayer en la N-I, a la altura de Iruña Oka. Una de ellas, la causante del accidente al circular en ese momento en dirección contraria, llevaba decenas de kilómetros huyendo de la persecución de varios cuerpos policiales después de una riña inicial desencadenada en un bar de Miranda de Ebro.

Esta persona ha sido identificada como C.V.P., de 43 años, y según las FSE tenía dieciocho antecedentes por motivos que no se precisaron.

Tanto él como el conductor del otro turismo, J.L.B.F., de 32 años y vecino de Haro, murieron en el acto. Los cadáveres fueron levantados a las 11.30 horas, tras ser desatrapados por los bomberos.

Se ayudó de un perro

La persecución resultó rocambolesca al principio y trágica después. Aunque hubo diferentes versiones, parece ser que el fugado superó un primer control policial a la salida de Miranda de Ebro.

Luego, tras entrar ya en la autopista AP-1 y recorrer varios kilómetros en dirección hacia Gasteiz, logró robar un vehículo de la Policía Local de esa localidad tras haber sufrido un accidente en Armiñon.

Se explicó que para ello C.V.P. utilizó incluso un perro de su propiedad con el que azuzó a los agentes mientras se hacía con el coche policial.

Ya con este vehículo, el hombre siguió su camino hacia Gasteiz, hasta que se adentró en el polígono industrial de Jundiz. Allí, después de circular varios minutos por sus calles y toparse con otro control de la Ertzaintza, volvió a salir a la autopista, pero la tomó esta vez en sentido contrario a la marcha, es decir avanzando hacia Burgos pero por los carriles que llevan hacia Gasteiz.

Apenas unos kilómetros más allá, a la altura de la localidad de Iruña Oka, este vehículo colisionó frontalmente con el coche que conducía el joven riojano.

Tanto el vehículo de la Policía Local de Miranda de Ebro en el que viajaba el huido como el coche Seat Toledo de la otra víctima del fatal siniestro quedaron absolutamente destrozados en su parte delantera.

Los bomberos tuvieron que emplearse a fondo para sacar los cuerpos de los hierros, pero se encontraban ya sin vida.

Tres cuerpos policiales

Para entonces, la Ertzaintza ya había sido movilizada también a raíz del aviso de la Policía española, por lo que fueron tres los cuerpos policiales que estuvieron implicados de uno u otro modo en esta persecución.

En un primer momento se indicó que se barajaba la posibilidad de que la persona que se dio a la fuga fuera armada, pero luego no hubo confirmación de este dato. Las fuentes oficiales sí quisieron destacar que el hombre tenía numerosos antecedentes delictivos.

La carretera en que se produjo la colisión permaneció cortada durante prácticamente dos horas para retirar los vehículos. La Ertzaintza anuncia que será ella quien se encargue de investigar todos los extremos de este fatal suceso que concluyó con dos fallecidos.