Del cielo de Múnich a la gloria como técnico, la estrecha relación entre Deschamps y el «OM»
El regreso de Didier Deschamps a los banquillos tras un año en blanco no ha podido ser más fructífero. El labortano ha vuelto a hacer campeón al Marsella después de 18 años de sequía. En el texto, GARA repasa la situación de la mayoría de los torneos ligueros del continente.
Beñat ZARRABEITIA
El 26 de mayo de 1993, en el antiguo Olímpico de Múnich, el OM batió al Milan y dio la primera y única Copa de Europa de su historia al fútbol del Estado francés. Barthez, Boli ¯autor del único gol del choque¯, Sauzeé, Angloma, Desailly, Boksic, Völler o Abedí Pelé eran algunas de las estrellas de aquel equipo. Sin embargo, el jefe del vestuario y gran capitán del grupo era Didier Deschamps. El vasco fue el encargado de levantar la orejona. Fue el cénit de una de las grandes escuadras europeas del inicio de la década de los noventa. Sin embargo, el escándalo protagonizado por su presidente, el conocido empresario Bernard Tapie, provocó el fin de un ciclo. Se comprobó que Tapie había intentado comprar partidos y el OM fue enviado a la segunda división.
Fue una larga travesía del desierto, durante la que los de Marsella han contado con estrellas como Pires, Drogba o Ribery, y fueron salvados de un nuevo descenso por Javier Clemente en el año 2000. Ahora, 10 temporadas después y también con un técnico vasco, el Velodrome vuelve a conocer la gloria. Una espectacular remontada ha permitido al OM ganar la Liga tras 18 años de sequía.
Superando una desventaja de 10 puntos y aprovechándose de que Girondins y Lyon se han centrado en la Champions, Deschamps ha sabido hacer campeón a un bloque sin estrellas. Su equipo cuenta con buenos futbolistas como Niang, Lucho González o Ben Arfa, pero carece de una referencia clara. Hecho que ha permitido al técnico ser el líder del grupo y acometer cambios tácticos decisivos. Un éxito que realza su trayectoria como entrenador. Subcampeón de Europa con el Mónaco, devolvió a la Juve a la Serie A y, ahora, campeón de la Ligue 1. Lille, Auxerre y Lyon se disputarán la segunda plaza.
Bayern e Inter, a por el triplete
El Alemania, el Bayern ha superado todos los obstáculos y ha batido al Schalke en el sprint final. El Werder Bremen se ha hecho con la tercera plaza de Champions, mientras que Leverkusen y Borussia Dortmund se conformarán con la UEFA. Los de Heynckes ostentaron el liderato durante varias fases pero se han desinflado en las últimas jornadas. Wolfsburgo, Hamburgo y Stuttgart se han quedado fuera de Europa. Peor le ha ido al Hertha de Berlín con su descenso.
En Italia aún está todo por decidir. Mou y su Inter sueñan con el triplete. Ya se han hecho con la Coppa, el domingo pueden certificar el Scudetto, y el 22 tratarán de hacerse con la Champions ante el Bayern en Madrid. Para volver a ganar el campeonato doméstico, deberán superar al descendido Siena en el último escollo. Los nerazzurri cuentan con dos puntos más que la Roma. Los capitalinos deberán de ganar al Chievo en Verona y esperar un pinchazo del Inter. La tercera plaza será para el Milan, mientras que Sampdoria y Palermo se jugarán el último puesto de Champions. Toda la ventaja es para los genoveses, después de su victoria del domingo en casa de los sicilianos. La mayor decepción del curso ha sido la Juventus. Los piamonteses se han quedado fuera de la UEFA incluso y deberán reconstruir a fondo su escuadra.
Sorpresa del Twente y doblete de Sarriegi
En Holanda, nuevo y sorprendente campeón. El Twente de Steve McLaren, crucificado en Inglaterra tras su fracaso como seleccionador de los pross, perdió el pasado verano a Arnautovic y Elia, sus mejores jugadores. Sin embargo, McLaren ha conseguido que el costarricense Bryan Ruiz se haya convertido en una referencia ofensiva absoluta, que el veterano danés Kenneth Pérez sea un futbolista determinante en la Eredivisie o que Brama se haga con un sitio en Holanda y Jakob Poulsen lo tenga en Dinamarca. En la vecina Bélgica, el Anderlecht ganó con solvencia su la Jupiler Pro League y ha puesto en órbita a Boussoufa y, sobre todo, a Romelu Lukaku.
Grecia se ha teñido de verde. En una campaña marcada por la triste crisis económica a la que han conducido al país heleno, el Panathinaikos se ha hecho con el doblete. Cuestión de menor importancia, pero que Josu Sarriegi recordará para siempre. Ha sido pieza clave en la defensa de Tenk Cate. Finalmente, el Rangers ha batido al Celtic en Escocia y en Turquía Fenerbahçe y el sorprendente Bursaspor se jugarán la SuperLig.