El vertedero de materiales inertes en la cara norte del monte Erreniega (El Perdón) supondría un «grave e irreversible impacto ambiental» en la zona y afectaría tanto a la regata de agua salada como a la vegetación, fauna y cultivos.

Así lo expusieron ayer algunos vecinos afectados durante una concentración que realizaron ante el Departamento de Medio Ambiente y Desarrollo Rural del Gobierno de Nafarroa con motivo de la entrega de 1.360 firmas de personas contrarias a este proyecto, promovido por la empresa Recuperación Ambiental SL.

Los firmantes comparten una serie de alegaciones comunes contra este proyecto, tales como la «vulneración» del principio de seguridad jurídica, «ya que la información que contiene es obsoleta y contradictoria».

Además de considerar que incumple la normativa básica que regula la implantación de un vertedero de residuos inertes, estos vecinos entienden que el vertedero es «incompatible» con el planeamiento urbanístico que afecta a Undio y otros pueblos de la zona, como Astrain, Muru Astrain y Zarikiegi.

Otra alegación de los opositores a esta escombrera se refiere a la ubicación elegida por la empresa promotora. A este respecto, constatan que «no existe planificación previa vinculante» para optar por la ubicación prevista, y añaden que la orografía «impide dicha ubicación».

Del mismo modo, constatan que el proyecto tampoco contiene «un auténtico estudio de alternativas», pese a que los vecinos sostienen que existen varias, y ponen como ejemplo la recuperación del pozo de las antiguas minas de Potasas.

Por último, los vecinos alegan que «no se ha valorado ambientalmente» la zona de implantación prevista ni su repercusión en la población afectada y en la salud de las personas. «Es una actividad molesta, insalubre y nociva, que conlleva polvos, ruido y contaminación del aire», señalan en el escrito de alegaciones entregado ayer por el alcalde de Undio, Joaquín Herrero, y la alcaldesa de Muru Astrain, Camino San Martín.

700 camiones diarios

Durante la concentración de ayer, miembros de la Asociación de Afectados por el Vertedero El Perdón advirtieron de la «alta peligrosidad y accidentabilidad» que conllevaría, teniendo en cuenta que por los núcleos urbanos afectados transitarían cada día 700 camiones, lo que supone un camión por minuto en horario laboral.

Como alternativas, proponen diversificar el número de vertederos en Iruñerria, en lugar de concentrar los vertidos en uno solo, y recomendaron a los promotores que contemplen la proyección de escombreras dentro de las zonas a urbanizar en los nuevos planes urbanísticos.

El Ayuntamiento de la Cendea de Zizur también está preparando sus propias alegaciones al vertedero, que serán entregadas la próxima semana.

Tanto el Concejo de Undio como la asamblea de vecinos han hecho un llamamiento a reactivar la Asamblea de Pueblos del Perdón. «Es inadmisible que nos quieran enterrar y amargar nuestra vida para saciar las ansias de ganancias de una asociación de promotores», afirman.