El hecho de que los dos primeros clasificados hayan sumado 99 y 96 puntos respectivamente ya lo dice todo. Que entre ambos también hayan logrado 200 goles a favor es otro dato más que significativo para afirmar que la Liga española va camino de convertirse en una versión adinerada del campeonato escocés. Allí, año tras años, Celtic y Rangers muestran su supremacía deportiva, económica y social. En el Estado español, Barcelona y Real Madrid hacen lo propio. Adornados, además, de un gasto desproporcionado, sus ingresos televisivos les otorgan otro plus de ventaja sobre el resto.

En lo deportivo, el Barcelona ha vuelto a ser el mejor equipo. Los de Pep Guardiola han practicado un fútbol vistoso, brillante por momentos, y se han alzado merecidamente con su segunda Liga consecutiva. El técnico catalán ha tildado a su grupo de «irrepetible» y puede que no le falte razón. Sumar 99 puntos, anotar 98 tantos, ser el equipo menos goleado, contar con el Pichichi y el Bota de Oro en sus filas y haber cedido una derrota en todo el campeonato son datos para la historia. Eternidad a la que ya entraron los cules con los seis títulos que sumaron en el pasado curso.

Basados en un juego combinativo no exento de paciencia, una verticalidad fuera de lo común, dominio absoluto de la posesión, presión extenuante para recuperar el balón e infinidad de individualidades, los blaugrana han vuelto a arrasar a sus rivales. Excepto en el Calderón -derrota-, y en los campos de Euskal Herria, donde cedieron sendos empates.

Guardiola, amante del fútbol ofensivo, ha vuelto a construir la casa por los pilares. Valdés se ha confirmado como el meta más en forma de la liga, pero es dudosa su presencia en el Mundial. Cuestión de vestuario, dicen. Sería suplente de Casillas tras una gran temporada y es público que su relación con Reina no es la mejor. En las alas Alves no ha rendido como el curso pasado, pero ha vuelto a ser muy importante. Por la izquierda, sin hacer ruido, Maxwell ha sido un recambio de garantías para Abidal. En el centro, Piqué y Puyol han sido indiscutibles. Márquez ha tenido problemas con las lesiones, Milito ha vuelto a sonreír, mientras que Chygrynskiy no ha demostrado el porqué de los 25 millones pagados por él.

Xavi e Iniesta son las piedras angulares del equipo. Pequeños y fantásticos jugadores. Dos de los mejores del mundo. Busquets, Touré y Keita han sido sus acompañantes. Cemento armado no exento de calidad.

Pedrito ha sido la gran revelación del campeonato. El canario ha sumado más de 20 goles y su inspiración ha sido determinante en muchas ocasiones. Su temporada le puede llevar al Mundial, se lo merece. El canterano ha sentado a Henry, futbolista recuperado por Guardiola la pasada campaña pero que parece que abandonará Can Barça. Otro cuyo futuro no está claro es Zlatan Ibrahimovic. El sueco de origen bosnio empezó bien pero ha acabado como suplente de Bojan Krkic, que ha ido de menos a más. 45 millones de euros más Eto'o son una cifra que está pesando sobre Ibra. Más aún cuando se escuchan rumores sobre el fichaje de Villa. Sin embargo, un nombre emerge por encima de todos, el de Leo Messi. El argentino ha completado un curso estratosférico. Coronado como el mejor jugador del mundo, ha igualado los 34 tantos que anotó el mejor Ronaldo en la 96-97.

La segunda plaza ha sido para el Real Madrid. Los blancos no han sumado ningún título tras la inversión de 300 millones realizada por Florentino. Han completado una gran Liga, consiguiendo 96 puntos, su récord histórico, y anotando 102 dianas pero se han tenido que conformar con ser segundos. Hecho que junto a los batacazos en Copa y Champions hacen imposible la continuidad de Pellegrini. Ya suena Mou.

Cristiano Ronaldo e Higuaín han tirado del carro, junto con la línea defensiva. Los fichajes de Garay y Albiol han dotado de mayor seriedad a la zaga merengue. Al igual que la calidad y dinamismo de Xabi Alonso a la medular. Por el contrario, Kaká ha sido el gran fiasco de la temporada. Ha padecido problemas de pubis y ha tenido un rendimiento muy discreto.

En cuanto a lo emocional, la presente ha sido la última campaña de Guti en Chamartín y puede que también de Raúl. Mitos vivientes del madridismo.

Tercero, a años luz de los dos primeros, ha sido el Valencia de Emery. Los del hondarribiarra han completado una temporada excepcional. Y es que a pesar de haber concluido a 28 puntos del campeón, han cumplido su objetivo. El Sevilla, por su parte, puede salvar la temporada con el título de Copa, ya que en Liga ha cubierto un curso mediocre. Cuartos tras un gol del canterano Rodri en el descuento, los hispalenses no han dado el nivel esperado. La lesión de Luis Fabiano y el bajo rendimiento de Kanouté y Negredo, la clave.

Fenomenal trabajo del Mallorca de Manzano. Superando todos los problemas económicos han estado a un paso de alcanzar la Champions. Grandísimo rendimiento de Aduriz. En la UEFA le acompañará el Getafe de Michel. Un equipo que ha contado con el talento de Pedro León. Fuera de Europa, de momento, se ha quedado el Villarreal. El submarino desdeñó los métodos de Valverde y acabó remontando en el tramo final. Camino inverso ha seguido un Athletic que no ha cumplido con una meta a su alcance y debía haber logrado por plantilla.

El Depor de Lotina se hundió y acompañó en la zona media al Atlético -que ha salvado el año con la UEFA y puede rematarlo con la Copa-, el gris Osasuna de Camacho, un cumplidor Sporting o al Almería de Lillo. Gran trabajo del tolosarra.

Por abajo, el Racing respiró con un último choque llenó de suspicacias y el Málaga lo hizo sufriendo de lo lindo. El Zaragoza renovó por completo el equipo en invierno y, finalmente, consiguió su objetivo.

Valladolid, Tenerife y Xerez se despiden de Primera. Los pucelanos firmaron su sentencia destituyendo a Mendi pero recuperaron la ilusión gracias a la labor de Javi Clemente. Los isleños ofrecieron una bonita propuesta, pero les faltó calidad y lo del Xerez de Gorosito y Mario Bermejo ha tenido un enorme mérito tras cuajar una sensacional segunda vuelta.