Itziar AMESTOY I

Seis espectáculos que se pueden enmarcar dentro del movimiento generado en torno a Koblakari y otras dos funciones llegadas desde fuera forman el programa de Zirkualde. La iniciativa ha surgido como parte de la programación del Ayuntamiento de Bilbo, que busca descentralizar la oferta cultural y llevarla hasta los barrios. Así, Errekalde será el hogar de este nuevo circo al aire libre. Desde el consistorio comentan que buscan lanzar un programa de entretenimiento «basado en las artes escénicas de calle, que aspira a convertirse en referente a nivel de circo» en Euskal Herria.

Pedro Ormazabal, técnico municipal, explica que quieren dar a conocer las diferentes actividades y disciplinas que se generan en torno al circo. Para ello han contado con la colaboración, en esta primera edición, de la Asociación Koblakari. Este grupo relata que, «ante la necesidad de reunirnos e impulsar los malabares en especial y el nuevo circo en general», decidieron crear Koblakari en el año 2001. Se definen como un «un grupo de bilbainos inquietos, activos y preocupados por la falta de actividad circense» en Bilbo. Así, Gorka Pereira, componente del mismo, valora como positivo cualquier propuesta que contemple el circo. Más allá de su participación en Zirkualde, Koblakari organiza cada año en diciembre una convención que genera en Kukutza un rico intercambio entre malabaristas de lugares diversos.

Programa de Zirkualde

Un pasacalles a cargo de Koblakari inaugurará el festival mañana. Durante el fin de semana, asimismo, se encargarán de realizar unos talleres. Esta iniciativa pretende ofrecer la posibilidad de probar algunas de las técnicas circenses, como los juegos malabares con diábolos y aros y trabajos de equilibrio. Gorka Pereira reconoce que lo habitual es que sean niños y niñas quienes se acerquen, aunque recuerda que los talleres «están abiertos a todo el mundo».

Seis de los espectáculos se pueden englobar en torno a Koblakari, aunque Pereira apuntilla que son como compañías separadas. Junto a ellos, habrá dos números que vienen desde fuera. El primero tendrá lugar a las 21.00 del viernes. La compañía Muchas Noches y Buenas Gracias presentará su espectáculo «Le petit cabaret», en el que un pequeño cabaret ambulante paseará con «un músico peculiar, una cantante de ópera, magia cómica y muchas sorpresas más».

El sábado ofrecerá la posibilidad de ver tres espectáculos desde las 18.30 de la tarde. En la plaza de Errekalde estará, en primer lugar, «Argotu» de Debote Enbote, que acercará hasta el lugar un «viejo carromato lleno de malabaristas, músicos acróbatas y magos». Más tarde, «Oilaskotxea» de Malas Compañías dará vida a una divertida pollería ambulante en la que los propietarios tienen un pequeño problema: no saben cocinar. Por último, Alas Circo Teatro guarda un espectacular número de acrobacias aéreas. En «El Espejo», dos personajes suben muy alto por la cuerda y el trapecio, camino en el que se encuentran y desencuentran en sus acrobáticos enfados.

El domingo comenzará Nanny Cogorno y su espectáculo «Lunatik», es decir, más de tres horas en las que el payaso lunático perseguirá su simple empeño por hacer reír a la gente. Después, Xabi Larrea ofrecerá «Filamento el farolero» un espectáculo circense basado en los antiguos faroleros. Un personaje entre el clown y el mimo da vida a Filamento, un farolero humilde y simpático, que se tiene que enfrentar a las desavenencias de su trabajo. Por último, Circo Impretres llega con un dinámico espectáculo, «El loco baile del circo», en el que tres personajes harán gala de sus diversas habilidades.

Tanto el viernes como el sábado, después de las representaciones, Koblakari se encargará de alegrar el ambiente nocturno. Así, habrá pequeñas actuaciones y vídeos. El escenario en este caso no será la plaza de Errekalde, sino que Koblakari se desplazará al lado de las terrazas de los establecimientos hosteleros que se encuentran en los alrededores de la plaza.