La huelga del Frente Militante de Todos los Trabajadores (PAME) el martes en Grecia paró la actividad en este país. Los sindicatos de orientación de clase de las tripulaciones y las fuerzas del PAME secundaron la huelga, «a pesar de la intimidación de parte del gobierno socialdemócrata, los armadores y los demás partidos burgueses». La huelga «fue un éxito» a juicio del sindicato, aunque contra ella emplearon los «métodos más sucios» como sentencias que declaraban la huelga ilegal, órdenes detención a sindicalistas y, entre otras, «una bomba terrorista en la casa del líder del PAME en Tesalónica con el fin de intimidar».