La semana se está coloreando con actos, manifestaciones, premios literarios, películas y documentales que se acercan a las inquietudes de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales. Bueno, esto hay que decirlo que en términos televisivos, se convierte en un juego de contrastes y que un recorrido por las posibilidades de los canales, te puedes encontrar con alguien que no esconda, sino que se vanaglorie, de su actitud homófoba, o que intenten hacer un juego de concatenaciones asegurando que los huelguistas del Metro madrileño van a parar la huelga este fin de semana con el fin de no crear ningún problema a la Gran Fiesta de la comunidad LGBT en Chueca. Claro, son las maneras que tienen los periodistas de la derecha española más rancia para intentar descalificar a todos, cuando no se dan cuenta que lo único que logran es que se rían de ellos, porque, con todas las salvedades, problemas coyunturales, si algo ha crecido en la sociedad en la que vivimos, en términos generales, es la aceptación de la realidad de LGBT, aunque, insisto, todavía exista homofobia a raudales, y siguen habiendo demasiados chistes de «mariquitas».

La 2 ofreció la noche del miércoles una película documental llamada «Homofamilias», que nos hizo una radiografía muy en relieve, de una serie de familias de una parte de los USA en donde la mayoría establece su vida desde relaciones de LGBT, lo que nos dejó unas imágenes que contenían muchos valores positivos, una clara disposición para mostrar de la manera más realista y cruda, esas realidades, pero que a la vez podía provocar una suerte de rechazo involuntario debido a presentarnos casos en donde el proceso de aceptación, las disfunciones, los problemas han sido, y en algunos casos parecen persistir, graves y han marcado a esas personas que vemos como en un día del orgullo gay, se manifiestan, celebran sus fiestas y nos cuentan algunos de los pormenores de su existencia. Una programación oportuna. Una película discutible en algunos aspectos peliagudos. Y como siempre, el asunto de más difícil acomodo, aceptación y que parece acarrear más dolor es la transexualidad. Las leyes no protegen lo suficiente esta situación. Todo llegará.