Piskerra se forma a principios de 1985 en Tudela. Tras unos cuantos ensayos, José Samanes, guitarra y voces, Pedro Laborda: guitarra y voces, Eduardo Raimóndez, bajo y voces, Kandi Álvarez, teclados y voz y Suso Yera, batería se entienden a la perfección. Coincide, además, su salida a escena con el tumulto rockero que recorre cada pueblo de Euskal Herria. No tiran por el punk-rock ni estilos extremos, pero su rock and roll de calle, sus buenas composiciones, van calando. De hecho, basta tan sólo un año de preparación como grupo para que su primer disco aparezca, «Apuñálalo», editado por Damitor y aún en vinilo.

El origen es Tudela, pero lo cierto es que cada componente de Piskerra reside en un pueblo diferente. «Somos el grupo de las casas de las madres de..., pues hemos ido siempre ensayando por los diferentes pueblos de los que somos y en lugares tan peculiares como la casa de la madre de Suso, en casa de mi madre, en la de Pedro, en la de Jose... y en una granja en medio del campo», recuerda Eduardo.

Con todo, es cierto que siempre se nos ha ubicado en Tudela, pero la verdad es que de ahí sólo había dos: Suso y Kandi, luego Eva, los demás éramos de Arguedas y Valtierra. A mí siempre me ha gustado decir que éramos bardeneros. Lo mas curioso es que cuando íbamos a tocar a Zaragoza nos ponían en los carteles «Euskal rock» y cuando íbamos de Iruña pa arriba éramos maños; en fin, de tierra de nadie», concluye resignado el bajista.

En abril de 1988 aparece su segundo trabajo «V Centenario» editado por Justine Records, lo que supone una subida en la escala de méritos. Durante todo este periodo el quinteto actúa con frecuencia por buena parte de Euskal Herria, aunque siempre marcados por la distancia geográfica y los puntos más calientes.

En marzo de 1990 la discográfica RDK se interesa por el grupo y edita lo que a la postre serán sus últimos trabajos: «Demasiado cielo sobre nuestras cabezas», mayo de 1991, y «Ziudad Zoologicada», finales de 1993. Otros dos buenos discos que cierran época y etapa. En «Ziudad Zoologizada», quien toca la batería es ya Eva Fernández.

«Nos hemos vuelto a juntar y a recordar canciones, vibraciones, después de 16 años sin tocar juntos, tristemente por una muerte. Recuerdo -señala Eduardo Raimóndez- que el último concierto que dimos fue en junio del 94 en la plaza de toros de Tudela con motivo de la marcha antipolígono de tiro de las Bardenas. En aquel concierto tocamos los que vamos a estar este sábado: Kandi, Pedro, José, Eva y yo, Waldo (Eduardo)».

En cuanto a la puesta a punto para este concierto, Piskerra lo han tenido desigual, ya que Pedro y Eduardo dejaron la música, aunque siguen hablado de ella en casi todas sus conversaciones. Por contra, Kandi no ha parado. Hace años se trasladó a Tarragona. donde formó Kandi i els que Son, José toca en Malavela, grupo con el que ya lleva editados cuatro discos y Eva es parte de Lambrettos.

El ayuntamiento de Tutera ha accedido a que el homenaje sea en la calle Herrería, peatonal. Y,a demás, Piskerra quiere agradecer la colaboración de los bares de la zona que han costeado los gastos de sonido y luces y a todas las personas que han colaborado en la infraestructura del evento: carteles, cena... Piskerra han preparado una veintena de recuerdos.