Tras la finalización de la cuarta etapa del Tour, el vencedor, el italiano Alessandro Petacchi, afirmó que tenía «buenas sensaciones» y que el pavés en la jornada anterior le hizo bien, ya que llegó «con fuerza» para volver a arrancar «de lejos», como cuando ganó en Bruselas.

Tras siete años sin vencer en una etapa del Tour, ha ganado dos veces en cuatro días y, a su juicio, eso es debido a «la fuerza» que siente en los últimos metros, aunque en ambos casos ha arrancado de lejos. «Se está viendo a un gran Petacchi», sentenció.

Uno de los perjudicados por el buen momento de Petacchi, Óscar Freire, reconoció que «me han fallado las piernas a la hora de la verdad. No venía muy atrás, pero hoy no tenía fuerzas, no me ha pasado nada más».

Uno de los grandes protagonistas vascos del día, Iban Mayoz (Footon-Servetto), recalcó que «si vas en el pelotón, como estos días en los que siempre hemos viajado persiguiendo, no puedes conseguir nada. Llego al Tour con la ilusión que me ha dado hacer tan buen Giro y me estoy encontrando bien, pero ya en esa segunda etapa en Bélgica perdí tiempo por la caída. Si de por sí tenía claro que mi objetivo en este Tour eran las fugas, con ese tiempo perdido tenía más motivo. Si las piernas me acompañan, intentaré seguir buscando la cabeza de carrera».