Denuncia
Los escándalos de corrupción que afloran en los predios peneuvistas en Araba se suman a la denuncia de espionaje político por parte de la Ertzaintza. Nada nuevo, por otra parte. La corrupción se instaló hace ya muchos años en el sistema y la denuncia del PSOE suena a cinismo electoralista. Del espionaje político también hay noticias desde hace años. La izquierda abertzale viene sufriéndola de forma constante. Con la agravante de la absoluta impunidad para sus autores.