La Federación de las Casas Regionales de Nafarroa vetó la actuación de cuarenta niños y niñas del grupo de baile Etorkizu- na Dantza Taldea de Sakana porque se negaron a desprenderse de la ikurriña.

Esta Federación contrató al grupo de baile para que ofreciera una actuación dentro de los actos de las casas regionales en el Bosquecillo durante los sanfermines. Dos días antes de la actuación, el grupo de baile recibió una llamada en la que se les exigía que no llevaran la ikurriña al acto, alegando que el Gobierno de Nafarroa les retiraría la subvención de no ser así.

Tras ponerse en contacto con el presidente de la Federación, Benjamín Arca Castañón, conocieron sin embargo los verdadero motivos del veto. En primer lugar, les aclaró que la decisión de no permitir ikurriñas en su recinto era exclusivamente suya y de la junta directiva, y que las razones esgrimidas para ello eran que la ikurriña «no representa a ninguna cultura navarra», y que «el resto de casas regionales no suele llevar nunca banderas, ya que se caracterizan por ser apolíticas».

La junta de Etorkizuna decidió no ceder y la tan ensayada actuación no se llevó a cabo, ya que consideran la ikurriña que siempre les acompaña como «un símbolo de la identidad cultural que nos caracteriza».

En la nota de denuncia, Etorkizuna critica que además el día de la actuación excusaron la ausencia de Etorkizuna alegando motivos ajenos a ellos.

«La verdad es que fuimos excluidos y vetados por representar a través de nuestros bailes a una parte muy importante de la cultura navarra, arraigada en las cadenas de nuestro escudo», sostiene el grupo de baile, además de demostrar que las razones esgrimidas para el veto son falsas.