Samuel Sánchez trasmitió un mensaje positivo en la jornada de descanso de Pau ante la etapa de montaña más decisiva del Tour que acabará hoy en la cima del Tourmalet. Dijo que no se quedó en el Aspin por falta de fuerzas y que la última subida desde Luz St Sauver y la lluvia que se espera hoy le convienen.

El asturiano atendió a la prensa en el hotel en el que todos los años se hospeda en Pau el Euskaltel-Euskadi, donde recibió la visita de su mujer y de su hijo Unai, de dos años, que con una moto -naranja por supuesto- iba de un lado para otro sin perder de vista a su padre.

Consideró la subida al Tourmalet «el puesto más duro de este año del Tour. Son 16 kilómetros al 8%. Es un puerto que a ritmo se puede subir muy bien y que es muy largo. No es del estilo de Ax3 Domaines, que íbamos a cambios de ritmo. Hay que ver cómo estoy físicamente, pero es un puerto que me gusta mucho, como la Madeleine, sin grandes cambios de ritmo».

Le preguntaron si le va el puerto mejor que a Menchov, su gran rival en la lucha por el tercer puesto, y respondió que ««a él le va bien todo. Ganó dos Vueltas y un Giro y experiencia tiene como yo o más. Va a atacar seguro. Él no se conforma con el tercer puesto, tiene la opción de pasar a Andy en la crono».

Se le dijo que Menchov siempre ha tenido algún día malo en el Tour y respondió que «ya tuvo su momento malo en La Madeleine, igual no tiene más, aunque ojalá mañana tenga otro». Pero vino a descartar que aproveche a lluvia, cuya presencia en la etapa de hoy agradece, para atacar en un descenso y aprovechar su superioridad en ese terreno: «Desde que acaba el Soulor hasta el Tourmalet queda mucho, sería un suicidio, tirarse a un precipicio sin parapente».

No se conforma con lograr en París el cuarto puesto, el mejor de toda la historia de un ciclista de Euskaltel, porque «fui cuarto en dos Mundiales y de eso no se acuerda nadie. Es un puesto malo». Sí estaba dispuesto a firmar el podio y «me da igual ser segundo que tercero. Lo importante es salir en la foto».

Cree que «salvo percance o desfallecimiento» ganará Contador el Tour porque «están muy igualados, pero Alberto tiene un punto mas y está corriendo más con la cabeza que Andy. Está midiendo más los esfuerzos, sabe que tiene el Tour ganado y guarda fuerzas para cuando le hagan falta en el Tourmalet y en Burdeos. Lo veo más inteligente y sólo tiene que limitarse a seguir la rueda de Andy, que es el que debe moverse porque en la crono es superior Alberto».

«Estoy disfrutando del Tour»

Samuel apuntaba que «estoy disfrutando del Tour, es lo máximo, la mejor carrera de tres semanas y si vas adelante... Es una carrera que requiere mucha concentración, tienes mucha presión, aunque a medida que se acercan los Campos Elíseos tienes ganas de acabar. Este año lo vivimos de manera especial porque la cosa va bien con la espinita de Morzine porque tuve la oportunidad y la dejé escapar, pero no va mal la cosa».

También lamentó que en la bajada de la Madeleine no pudo empalmar por muy poco con Contador y Schleck, «con lo que habría sacado un minuto más con Menchov», con el que asume que el podio está complicado porque juega en su contra la crono de Burdeos: «En la segunda Vuelta que ganó le superé en 23 kilómetros, pero en más de 30 Denis me ha ganado en las cronos largas. No quiero pensar en cuanto necesito para defender el podio con él, porque la etapa del Tourmalet puede cambiar todo, para bien o para mal».

A su favor tendrá el apoyo de la afición vasca, aunque Samuel recordaba ayer que «los gritos de ánimo eran para todos. Daba gusto ver cómo animaba la gente a todo el mundo. La afición entiende de ciclismo y nos apoya a nosotros y a los extranjeros».