Euskaltel recurrirá el laudo de la Corte Internacional de Arbitraje, que es un organismo dependiente de la Cámara de Comercio Internacional, con sede en París, que pretende obligar al operador vasco a pagar 222 millones a Orange, como indemnización por los supuestos perjuicios tras la ruptura de su alianza en 2006. La empresa vasca considera que la resolución es «nula de pleno derecho» y confía plenamente en una resolución favorable en los tribunales ordinarios «que deje sin efecto el laudo, que resuelve cuestiones que no son competencia del Tribunal Arbitral», según explicaron a GARA fuentes del operador vasco de telecomunicaciones.

El laudo emitido establece que Euskaltel podría tener que pagar a Orange, propiedad de France Telecom, una indemnización de 222 millones por los posibles daños que se le han causado después de que en 2006 se rompieran las relaciones entre ambas.

El origen

Uno de los temas más importantes es que el laudo aprobado en París no tiene carácter ejecutivo, ni supone la resolución definitiva del conflicto entre Euskaltel y France Telecom-Orange, que se inició hace tres años.

El conflicto tiene su origen real en el hecho de que los clientes de Euskaltel decidieron «libremente» mantenerse como tales, de acuerdo con el procedimiento establecido por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) del Estado español.

Euskaltel tiene «plena confianza» en una resolución definitiva favorable, que «invalide y deje sin efecto el laudo», que, «además de una total falta de fundamento, resuelve incluso cuestiones no sometidas a la decisión del Tribunal Arbitral».

Por ello, la compañía que dirige Alberto García Erauzkin advierte a tal efecto, que «ejercitará las acciones que le corresponden y defenderá sus derechos ante los tribunales ordinarios»