El Ejército norcoreano efectuó ayer disparos de artillería en el mar Amarillo, en la litigiosa frontera con Corea del Sur, en un clima de auge de la tensión entre ambos países, informó un responsable ministerial surcoreano citado por AFP.

Los disparos, un centenar según la agencia surcoreana Yonhap, tuvieron lugar cerca de las islas de Yeongpyeong y Baengnyeong, donde el pasado 26 de marzo se hundió la corbeta «Cheonan» a causa, según Seúl, de un torpedo norcoreano.

El Gobierno de Pyongyang ha negado formal y reiteradamente su implicación el aquel incidente, que puso al rojo vivo la situación en la península. La respuesta de Seúl fue organizar cinco días de maniobras navales a gran escala, que concluyeron ayer. En plena crisis, a finales del pasado mes de julio, las autoridades surcoreanas ya habían organizado movimientos similares, aunque aquellos los llevaron a cabo junto con EEUU

Esos ejercicios militares fueron duramente criticados por el Ejecutivo norcoreano, que aseguró -según recogía Efe- que respondería con contundencia a lo que consideraba un «claro acto de invasión militar».

La respuesta llegó apenas media hora después de que el Ejército surcoreano diera por concluido el entrenamiento, con- trado en ejercicios antisubmarino.

La reacción norcoreana ha vuelto a elevar la tensión en la ya de por sí conflictiva zona.