Pretemporada
Una noche insípida deja el triunfo en Génova
Un gol de Luca Toni en la segunda parte materializó la segunda derrota veraniega del Athletic. El equipo rojiblanco no pudo superar la presión local y apenas se acercó con peligro a la portería de Eduardo.
GENOA 1
ATHLETIC 0
Amaia U. LASAGABASTER
El Athletic pasó por el Luigi Ferraris sin pena ni gloria. El equipo rojiblanco ofreció una versión bastante insípida sobre el césped genovés, de la que Joaquín Caparrós extraerá sus conclusiones y la afición apenas recordará algún detalle en un par de semanas.
Y es que para que algo sea recordado, tiene que suceder. Y a ese respecto, el amistoso frente al Genoa estuvo un tanto parco. Sobre todo por parte del Athletic, bastante sobrio, aunque con altibajos, a la hora de defender -lo que no evitó, ni que las mejores ocasiones fueran de los locales, ni que el gol llegara en la misma dirección- y bastante atascado a la de atacar.
Con San José e Iturraspe víctimas del caos aéreo habitual, Joaquín Caparrós tuvo que cambiar de planes y llevarse a Italia a Ustaritz y Balenziaga. El primero fue titular en un once que no compartirá demasiados integrantes con el que se enfrentarán los bilbainos al Hércules en el primer partido de Liga. Apenas Iraizoz, Iraola, Amorebieta, Susaeta y Toquero parecen tener la plaza asegurada, aunque a Jon Aurtenetxe, visto lo visto, sólo le separaría esa semana que tiene que pasar por tierras japonesas. El resto tienen que acumular méritos. Incluyendo Iker Muniain, que ayer pasó bastante desapercibido, o Gurpegi y Orbaiz, a los que el grado de la veteranía no parece que vaya a bastarles para desbancar a Javi Martínez e Iturraspe de la lista de preferencias de su técnico.
Aunque el de Andosilla suma puntos con la adaptación a la banda derecha que vivió la pasada temporada. Igual que intenta sumarlos Balenziaga, en este caso para evitar una nueva cesión, al otro lado del campo. Ayer, ya en la segunda parte, Joaquín Caparrós volvió a probar al guipuzcoano como interior, por delante de Aurtenetxe.
Bastante menos de prueba y más de ensayo general tenía el once del Genoa. Y de ahí su mejor partido. No tanto en el primer tiempo, en el que, como su rival, tuvo tanta tranquilidad para defender como torpeza para atacar. Aún así, un par de cabezazos de Sculi se sumaron a la presencia, siempre inquietante, de Luca Toni, flamante fichaje de los italianos.
La balanza acabó de desnivelarse en la reanudación. Sobre el césped y en el marcador. En pleno carrusel de cambios, Palacio pescó un balón en el lateral del área y centró para que Toni anotase el 1-0. Los bilbainos no se resignaron y alguna arrancada les permitió acercarse al área, pero ni los minutos, ni el juego dieron para la remontada, con lo que acabaron encajando su segunda derrota veraniega.
Los jugadores que no viajaron a Génova entrenaron ayer en Lezama -con partidillo frente a un combinado de la cantera incluído- y volverán a hacerlo hoy a partir de las 10.30. A esa misma hora está previsto que parta de tierras italianas el avión de la expedición rojiblanca.
Iñigo Díaz de Cerio buscará minutos lejos de Lezama. El Athletic cerró ayer su cesión al Córdoba por una temporada, aunque se guarda la opción de repescar al delantero durante el mercado invernal.
De Cerio llegó al Athletic el pasado verano procedente de la Real, con la que había pasado en blanco prácticamente toda su última temporada, debido a una grave lesión. Aunque, en principio, no quedaron secuelas, la falta de ritmo y diferentes problemas físicos derivados de la inactividad pasaron factura al ariete, que apenas dispuso de oportunidades a las órdenes de Joaquín Caparrós.
Pese al optimismo con el que esperaba la nueva campaña De Cerio, la llegada de nuevos jugadores ha aumentado la competencia para un puesto ahora mismo muy caro. El jugador tendrá la oportunidad de ganárselo desde la lejanía.
A.U.L.
