El francés Alain Bernard retuvo su cetro de campeón continental de los 100 metros libres en la quinta jornada de los Campeonatos de Europa de natación. Bernard, que había empezado su participación decepcionando en la final del relevo 4x100 libre, se sacó la espina y pudo colgarse el metal dorado por de-lante del ruso Lagunov y su compatriota Meynard, respectivamente.

De las cuatro finales de la jornada, la del hectómetro masculino era la que más expectación levantaba y, por ende, Bernard debía sobrellevar mayor presión que nadie, una presión que logró dominar. Tras la llegada, el velocista galo estalló de alegría después de haber sufrido mucho particularmente en los metros finales.

«Sabía que iba a ser duro y, siendo así, la victoria se disfruta más. Durante 75 metros he controlado bien la carrera, pero luego me crispé un poco y llegué a pensar que el esfuerzo se iba a quedar en nada, pero ha sido una bella victoria», declararía después.

Santamaría, fuera de la final

De las otras tres finales, el francés Sebastien Rouault se colgaba el oro de los 800 metros masculinos, tras una cerrada pugna con el alemán Kabusch y el italiano Pizzetti, plata y bronce respectivamente.

Entre las féminas, la rusa Anastasia Chaun se llevaría el oro de la final de los 200 metros braza, por delante de la noruega Nordenstam y la danesa Pedersen. Otra nórdica, la sueca Sjoestroem, se impondría en la final de los 100 metros mariposa, superando en un apretado sprint final a la británica Halsall y a la también sueca Alshmaar.

Mientras, Eider Santamaría, finalista de la prueba de los 800 metros libre, se quedó a las puertas de acceder a la final de los 1.500 metros. La nadadora de Laudio realizó un tiempo de 16.37.14 y acabaría en novena posición, a casi seis segundos de la octava clasificada, la eslovena Tjasa Oder, que marcó el corte para la final.