En el año 2000, Haimar Zubeldia se llevaba la contrarreloj y la clasificación general de la Euskal Bizikleta. Diez años después, el ciclista usurbildarra ha logrado repetir el par de triunfos: por un lado, ganó en la crono de la etapa prólogo del Tour de L'Ain y por otro, conseguía imponerse en la clasificación general después de una dura etapa final, entre Culoz y Belley, de 126 kilómetros, en la que los corredores debieron superar un puerto de categoría especial como la Colombiere.

Desde luego que nadie le ha regalado al guipuzcoano de RadioShack este nuevo triunfo, y es que Zubeldia tuvo que aguantar la rueda del holandés Wouter Poels, ganador de la última jornada, y que terminó en el cómputo general con el mismo tiempo que el usurbildarra, sólo separados por unas pocas centésimas obtenidas por Zubeldia en la prólogo.

Ocho hombres destacados

La subida al Colombiere debía decidir la carrera y así lo hizo, con ocho hombres que lograron destacarse y descolgar al líder, Tony Gallopin, que perdería unos decisivos 38 segundos en la meta: Zubeldia (RadioShack), Poels (Vacansoleil), Moncoutie (Cofidis), Pinot (Fdejeux), Jeandesboz y Coppel (Saur-Sojasun), Tschopp (Bouygues) y Van Garderen (Columbia).

Poel, Moncoutie, Pinot y Zubeldia fueron los más rápidos en la parte final de la prueba, ya que descolgaron a sus rivales, y se repartieron la gloria de la jornada final entre el holandés de Vacansoleil y el usurbildarra de RadioShack, que lograba mantener la rueda de su rival más peligroso, y completaba con éxito los 572,3 kilómetros del Tour de L'Ain en 13.44.32, a un promedio de 41,65 kilómetros por hora.

Por su parte, David Bernabéu, del Barbot Siper, se imponía en la contrarreloj individual de la Vuelta a Portugal. El corredor español invirtió un tiempo de 37.44 en los 32,6 kilómetros entre las localidades de Pedrógão y Leiria. Bernabéu ascendió a la segunda plaza de la general, a 38 segundos de David Blanco quien, logrando la segunda plaza de la etapa, se aseguró el triunfo final.