Un frente frío enciende todas las alarmas en Rusia después de la ola de calor
GARA |
Tras la canícula y la ola de incendios sin precedentes que ha afectado la parte occidental de Rusia desde el comienzo del verano, un frente frío ha entrado por el noroeste y se dirige hacia Moscú, informó AFP. En la capital, se esperan fuertes lluvias, granizo y ráfagas de viento de hasta 28 metros por segundo.
Las fuertes tormentas provocadas por el frente han hecho saltar las alarmas y el primer ministro ruso, Vladimir Putin, afirmó ayer que «se han dado instrucciones para reparar lo más rápidamente posible las consecuencias provocadas por el paso de esta ola de frío y para movilizar a los servicios sociales y médicos».
Las tormentas que azotaron el noreste de Rusia la noche del domingo derribaron árboles y dejaron sin electricidad a cerca de 100.000 personas en 1.500 localidades en la región de San Petersburgo y en las cercanas Novgorod, Pskov, Vologda y Arjangelsk, según informó la delegación de Situaciones de Emergencia del Ministerio en San Petersburgo. Asimismo, la caída de una grúa de obra de 50 metros hirió gravemente a una mujer que pilotaba uno de los engranajes.