Las fotos de una soldado israelí posando sonriente al lado de detenidos palestinos con los ojos vendados y las manos atadas provocaron ayer incomodidad en el Ejército sionista e indignación entre los palestinos, mientras la protagonista de la polémica la calificaba de «incomprensible».

Las imágenes fueron colgadas en su perfil de la red social Facebook por la soldado Eden Abarjil, que finalizó su servicio militar en 2009, y fueron difundidas el lunes por blogs israelíes y la televisión pública del Estado sionista.

«Las fotos recuerdan a la de la soldado estadounidenses Lynndie England con presos iraquíes en la cárcel de Abú Ghraib, aunque no tienen el contenido sexual de aquellas», comentó Robert Mckey, un bloguero de «The New York Times».

El Ejército israelí denunció «el comportamiento vergonzoso de la soldado», precisando que acabó su servicio militar hace un año y medio, por lo que no puede ser castigada.

«Estos soldados israelíes, casi adolescentes, o poco más, se encuentran en una posición de poder en la que pueden dominar a la gente. Esta situación corrompe a los soldados», señaló a France Presse Ghassan Jatib, portavoz de la Autoridad Palestina, destacando que las imágenes «muestran la mentalidad de los ocupantes».

Mientras, la soldado Abarjil se mostraba sorprendida: «No entiendo qué hecho mal. No he usado la violencia ni les he despreciado. No hablé con los palestinos. Les di de beber, pero no les dije que les fotografiaba».