Romanos contra pictos
«Centurión»
El inglés Neil Marshall aplica su inventiva de peculiar creador fantástico a una revisitación del «peplum» abierta a otros géneros, en una historia de persecución y supervivencia ambientada en el siglo II del Imperio Romano.
M. I. | DONOSTIA
A Neil Marshall se le ocurrió la idea de «Centurión» cuando conducía en coche por una carretera de su Newcastle natal, al ver los restos que los romanos dejaron allí. Luego, introdujo en el argumento el mito de la Novena Legión, desaparecida durante su incursión en las colinas escocesas. «Centurión» se remonta al siglo II del Imperio Romano, que ya se había expandido por toda Europa, pero le faltaba por conquistar Britania. La película refleja las dificultades que los romanos encontraron para hacerse con las islas, debido a la resistencia de los pictos, antiguos pobladores del actual Gran Bretaña que utilizaban las técnicas primitivas de la lucha de guerrillas.
El director de «Dog Soldiers», «The Descent» y «Doomsday» da un renovado tratamiento estético al «peplum», influenciado por el Ridley Scott de «Gladiator», pero también introduce elementos de otros géneros, especialmente del western y del survival. En este último aspecto la crítica ha encontrado paralelismos con «Apocalypto», ya que las persecuciones a pie, monte a través, cobran un gran protagonismo. Se da la practica de la caza al hombre, con los pictos persiguiendo a los supervivientes romanos que han logrado escapar a sus emboscadas. La mayor parte del esfuerzo físico que suponen las escenas de supervivencia recae sobre el actor alemán Michael Fassbender.
Dirección: Neil Marshall.
Intérpretes: Michael Fassbender, Olga Kurylenko, Dominic West.
Fotografía: Sam McCurdy.
Música: Ilan Eshkeri.
País: Inglaterra, 2010.
Duración: 97 minutos.
Género: Peplum.
Dirección: Brad Peyton.
Fotografía: Steven Poster.
Música: Christopher Lennertz.
País: EE.UU., 2010.
Duración: 82 minutos.
Dirección: Carlos Benpar.
Intérpretes: Lilibeth Echeverry, Ester Bové.
País: Estado español, 2009.
Duración: 90 minutos.