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Detenido «La Barbie», uno de los capos más buscados del narco mexicano

La Policía Federal arrestó la noche del lunes a Édgar Valdez Villarreal, «La Barbie», uno de los narcotraficantes más destacados de México. Pese al hermetismo informativo sobre el operativo, varias fuentes apuntan que sería testigo protegido de la DEA estadounidense.

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«LA JORNADA»

Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, líder de una de las facciones en que se dividió el cártel Beltrán Leyva tras la muerte de su cabecilla [Arturo Beltrán Leyva, El Barbas] en diciembre de 2009, y considerado uno de los narcotraficantes más sanguinarios que operan en México, fue detenido la noche del lunes [madrugada de ayer en Euskal Herria] durante un operativo de la Policía Federal. La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal no dio detalles de la operación ni del sitio exacto donde fue aprehendido.

Oficialmente, sólo se dijo que la captura tuvo lugar en el Estado de México.

La Barbie ha sido el único de los capos que ha sobrevivido a un operativo de captura del Gobierno mexicano contra líderes narcotraficantes. El 15 de diciembre de 2009 fue abatido a tiros Arturo Beltrán Leyva, en Cuernavaca. El 29 de julio en Guadalajara, en un operativo realizado por efectivos del Ejército mexicano, resultó muerto Ignacio Coronel Villarreal.

Tras la captura de Valdez Villarreal, surgieron varias versiones de lo sucedido: que la operación fue realizada por mil agentes federales y la detención se logró después de un tiroteo de más de una hora. Asimismo, que La Barbie se entregó y formará parte del programa de testigos protegidos en EEUU, ya que es originario de Texas y existe un proceso penal en su contra en la ciudad de Atlanta, Georgia.

A pesar del cerco informativo, la SSP federal apuntó que el operativo -en el que no participaron efectivos del Ejército ni de la Marina- continúa abierto.

Informante de la DEA

En medio del hermetismo, en fuentes gubernamentales cercanas al gabinete de Seguridad Nacional circuló la versión de que La Barbie había entablado, desde hace al menos ocho meses, negociaciones con la agencia antidrogas estadounidense (DEA, en inglés) y que se había convertido en informante de las autoridades de ese país.

La Policía Federal desarrolló hace unas semanas un operativo fallido para capturar a Valdez, y que generó molestia en la Marina -que estaban convencidos de que serían ellos quienes conseguirían la captura-, porque les quedó la idea de que lo único que lograron fue alertar y abrir el cerco que estaban por cerrar los marinos.

Para algunos mandos navales resultó sospechoso que haya sido la Policía Federal y no el Ejército quien capturó a La Barbie, debido a que, al parecer, ya se había convertido en testigo protegido de la DEA.

La lucha contra el tráfico de drogas, a la deriva

La masacre de 72 emigrantes en el noreste de México, seguida de cinco ataques con explosivos y la ejecución de un alcalde vuelve a demostrar el poderío de los cárteles de la droga y su capacidad para desestabilizar, por lo que el Gobierno se verá obligado a replantear su estrategia, según expertos consultados por AFP.

Las últimas acciones constituyen un desafío a la ofensiva contra los cárteles que lanzó en diciembre de 2006 el presidente mexicano, Felipe Calderón. Desde esa fecha se han reportado más de 28.000 muertos.

«Ante todo lo ocurrido, el Gobierno debería replantearse si su estrategia es la correcta», dice José Reveles, investigador y autor de varios libros sobre el narcotráfico en México.

Los continuos enfrentamientos entre el cártel de Los Zetas (un grupo de ex militares que en los años 90 se convirtieron en pistoleros del cártel del Golfo) y sus antiguos jefes, han creado «serios problemas de gobernabilidad» en estados como Tamaulipas, según Jorge Bustamante, relator de la ONU para los derechos humanos de los emigrantes, quien añade lo ocurrido en este estado acerca a México cada vez más a «la imagen de Estado fallido». GARA

CANCÚN

Al menos ocho personas, entre ellas seis mujeres, perdieron ayer la vida en Cancún (al este de México), en un ataque con cócteles molotov a un bar, que fue atribuido por las autoridades al cártel de Los Zetas.

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