Internacional
La UEFA prohíbe las vuvuzelas por temas culturales
GARA | DONOSTIA
La UEFA prohibirá las vuvuzelas en los estadios donde se disputen partidos de competiciones continentales «por razones relacionadas con la cultura y tradición del fútbol europeo» y porque «la atmósfera de los partidos podría cambiar con el sonido de la vuvuzela». La UEFA cree que el uso de este instrumento «no sería apropiado en Europa, donde lo más característico es el continuo ruido de fondo de murmullo».
«La magia del fútbol consiste en el intercambio bidireccional de emociones en el campo y en las gradas, donde el público puede transmitir una amplia gama de sentimientos hacia los jugadores. Las vuvuzelas cambiarían por completo la atmósfera, ahogando las emociones de los aficionados y alejándoles de la propia experiencia del deporte», opina la UEFA.
En cuanto a los fichajes que se dieron a última hora del martes, la Premier League confirmó ayer el traspaso del holandés Rafael Van der Vaart del Real Madrid al Tottenham después de los rumores que decían que su fichaje no era válido por haberse hecho presuntamente después de las doce de la noche.
Otra salida en este mercado de fichajes, la del sueco Zlatan Ibrahimovic del Barcelona al Milan, aún sigue dando quebraderos de cabeza al club culé. Y es que el delantero reiteró que desconoce el motivo por el que Pep Guardiola dejó de hablarle y las razones de su salida del Barça: «No tenía ninguna comunicación con el filósofo, ningún contacto en absoluto, no sabía cuál era el problema, cuál era su problema, yo no tenía ninguno».
«Era algo nuevo para mí, no sabía cómo tomarlo. Tengo casi 29 años, no estoy en esa etapa en la que tengo que luchar con alguien si quiero jugar. No puedo permitirme perder un año sentado en la tribuna contemplando el tiempo. Lo vi el año pasado con Thierry Henry y no es algo agradable», agregó.
«Cuestión futbolística»
Por su parte, Andoni Zubizarreta, director deportivo del Barça, indicó que la salida del sueco se debió a «una cuestión futbolística que luego genera otras cosas, como incomodidad por parte del jugador al no jugar». Y puso un ejemplo: «Si el futbolista hubiese marcado 28 goles y hubiese jugado todos los partidos la temporada pasada no lo habríamos vendido».