Rechazo de Lezo y Pasaia a una estación intermodal impuesta
Los alcaldes de Lezo y Pasaia, ambos de la izquierda abertzale, han expresado su rechazo a la imposición de una estación intermodal en la zona de Gaintxurizketa, donde convergerían las vías de Renfe, Euskotren y TAV. Este macroproyecto está impulsado por el Gobierno español y la Diputación de Gipuzkoa, y conectaría con el futuro puerto exterior de Pasaia.
Iñaki VIGOR
El anuncio de que el futuro puerto exterior de Pasaia conectará en Lezo con una estación intermodal está «estrechamente relacionado» con las normas subsidiarias de esta última localidad. Así lo entiende el alcalde de Lezo, Haritz Salaberria, quien recuerda que en esta legislatura el Ayuntamiento ha elaborado un plan de ordenación territorial que contempla la conservación del entorno de Gaintxurizketa, precisamente una de las zonas afectadas por el proyecto impulsado por el Ministerio español de Fomento y la Diputación de Gipuzkoa.
«Estamos a la espera de que el Gobierno vasco y la Diputación den respuesta al planteamiento que defendemos en el Ayuntamiento. Parece ser que la Diputación va a imponer la ordenación que ella quiere mediante el Plan de Ordenación Territorial de Donostialdea», informó el alcalde de Lezo.
Según publicó ayer «El Diario Vasco», la hipotética estación intermodal ocuparía una superficie de unas 15 hectáreas, entre el hipermercado de Carrefour y el actual apeadero de Euskotren en Gaintxurizketa.
En esta plafaforma convergerían las mercancías ferroviarias que llegarían a través del TAV, Renfe y Euskotren, además del transporte por carretera, y estaría conectada con el futuro puerto exterior de Pasaia por medio de un túnel que atravesaría el monte Jaizkibel.
«Hipotecaría estas tierras»
A juicio del alcalde de Lezo, si este plan sigue adelante supondría «ocupar toda la zona rural que queda desde el pueblo hasta el alto de Gaintxurizketa».
«Nuestra valoración -añadió Haritz Salaberria, de la izquierda abertzale ilegalizada- es que se trata de un modelo territorial insostenible para el municipio de Lezo y para la comarca de Oarsoaldea. Por un lado, se asienta en un modelo que supone una gran inversión pública y poco beneficio social, y por otro lado generaría poca mano de obra, porque se trata de proyectos de logística».
El impulso a estos proyectos ha llegado tras una reunión mantenida el pasado viernes en Madrid entre el ministro José Blanco, el consejero Iñaki Arriola y el presidente de la Autoridad Portuaria, Miguel Buen.
A este respecto, Haritz Salaberria opina que «la única actividad» que el Ministerio de Fomento español y la Diputación de Gipuzkoa plantean para nuestra comarca «es la logística, lo cual significa que hipotecan estas tierras para otro tipo de actividades que generarían más empleo, tanto en el sector terciario como en el primario».
«En definitiva -resumió el alcalde de Lezo-, el anuncio de esta estación intermodal supone la imposición de un modelo territorial con el que no estamos de acuerdo. Además, no tienen ningún interés en consensuar estos proyectos con los municipios afectados, sino imponerlos, siguiendo sus propios intereses económicos».
Si bien la Diputación de Gipuzkoa está controlada por el PNV, Salaberria constata que en este tipo de macroproyectos este partido «cuenta con todo el apoyo del PSOE y del PP, a pesar de que hay una lucha entre los intereses de las empresas constructoras que son afines al PNV y las empresas que están más cercanas al PSOE, que también quieren sacar tajada».
«Meterlos con calzador»
En similares términos se expresó la alcaldesa de Pasaia, Maider Ziganda, también de la izquierda abertzale. Aunque apuntó que el proyecto de estación intermodal «afectará sobre todo a Lezo», no dudó de que está relacionado con el puerto exterior de Pasaia, «otro proyecto que ni está justificado ni es fiable».
«Estamos asistiendo a un nuevo intento de meternos estos macroproyectos con calzador», señaló de forma gráfica la alcaldesa de Pasaia, al tiempo que constató que, «a día de hoy, nadie ha podido demostrar ni su viabilidad económica ni su necesidad para este territorio».
Junto a ello, lamentó que ni la Diputación de Gipuzkoa ni el Gobierno español respeten las competencias municipales en la planificación territorial ni la opinión de los vecinos afectados. «Evidentemente, y al igual que están haciendo con el TAV y con la incineradora, en estos macroproyectos no han tenido en cuenta la opinión de la ciudadanía. No han contado con los ayuntamientos afectados, y además están pasando por encima de la opinión de los vecinos», criticó Maider Ziganda.
Por su parte, la izquierda abertzale de Pasaia mostró su rechazo «a quienes durante estos tres años, desde su poder político en la Diputación, no han dudado en planear y diseñar estrategias para quitar de en medio a Pasaia, pasando por encima de su Ayuntamiento para que no ejerza su competencia para organizar su territorio».
«El negocio inmobiliario, el pelotazo, es la base de la financiación del puerto exterior. Detrás de este proyecto -afirma- sólo se encuentran los intereses del lobby energético. Y nos pretenden asustar, como en su día hicieron con Lemoiz, diciendo que sin esta instalación energética no tenemos futuro o que sin el puerto exterior no es posible la regeneración».
Además, la izquierda abertzale denunció que los impulsores de estos proyectos «son capaces de pervertir la legalidad y robar a los ayuntamientos las competencias de ordenación urbanística con el objetivo de maquillar esta decisión».
Ocuparía 15 hectáreas en la zona del alto de Gaintxurizketa, donde convergerían las vías de Renfe, Euskotren y TAV. Estaría conectado con el puerto exterior de Pasaia mediante un túnel que atravesaría Jaizkibel.
El alcalde de Lezo señala que este proyecto está relacionado con el plan de ordenación territorial de este municipio, «que contempla la conservación del entorno de Gaintxurizketa».
El anuncio de este nuevo proyecto ha coincidido con la invitación cursada por la Diputación de Gipuzkoa para acudir a las 18.00 de hoy a una reunión sobre «participación ciudadana» que tendrá lugar en Trintxerpe.
«No es coincidencia que lo convoquen precisamente en Pasaia, cuando aquí tanto el Ayuntamiento como los vecinos estamos peleando por que se respete el ámbito de decisión municipal. Hablan de participación y ni siquiera escuchan a la ciudadanía», declaró la edil de Democracia Participativa del Ayuntamiento de Pasaia, Obdu Lorenzo.
La Herrera Herrira Batzordea, por su parte, ha anunciado que, en lugar de acudir a la reunión propiciada por la Diputación, realizarán a esa misma hora una concentración en la calle para reclamar el derecho de los pasaitarras a decidir su futuro. I. V.