ZINEMALDIA
«Las marimbas del infierno»
Koldo LANDALUZE
El comienzo de este comentario debe iniciase con el final de la película; cuando Julio Hernández Cordón deja impreso en el rótulo: «Esta película está dedicada a aquellas personas que se empeñan en hacer proyectos impensables en un país como el mío». De ello va, simple y llanamente, “Las Marimbas del Infierno”, una excelente muestra de esa tipología de «cine guerrillero» donde la carencia de medios se suple con grandes cantidades de entusiasmo y muchas ganas de contar una buena historia.
Finalizada la proyección, se escuchaban diversos comentarios que hacían alusión al por qué de la inclusión de una película de estas características en un festival de esta categoría. Al contrario de lo que opinaban mis dilectos «compañeros», he de reconocer que ésta muy modesta propuesta, que adopta las formas de un falso documental, me ha llenado muchísimo más que algunas de las «Perlas» que han llegado avaladas de otros festivales gracias a su carencia total de desprejuicio y su arrolladora vitalidad.
Al comienzo del filme, Don Alfonso -el marimbista alrededor del cual pivota la realización-, habla ante la cámara desde la soledad de su hogar, desnudo de gente y mobiliario. El hombre confiesa que, debido a la amenaza de una mara que le exige dinero, ha tenido que ocultar a su familia. El hombre rompe a llorar desconsolado en cuanto nos confiesa que la siguiente en ser ocultada debe ser su inseparable marimba. Aquí comienza la quimera, «el proyecto impensable» al que alude Hernández Cordón; la aventura quijotesca que compartirá el marimbista en compañía de su ahijado, un chico de la calle al que le gusta esnifar productos químicos, y el líder de una banda de heavy. De esta singular reunión nace la idea de fusionar la marimba con los acordes de heavy satánico. Divertida, a ratos muy divertida -la escena del primer ensayo- y sin perder el horizonte de una realidad social tan dura como la guatemalteca, «Las marimbas del infierno» es un saludable respiro y toda una declaración de principios.