La visita de un oponente de la calidad del Barcelona -hasta con ocho campeones mundiales entre sus titulares- siempre obliga a firmar un impecable balance defensivo si se quiere salir vivo de la contienda. Sin embargo, tan importante como este aspecto es disponer de las armas suficientes para contrarrestar su juego metiéndole miedo en jugadas de estrategia, balones largos o contragolpes.

Y en esa faceta, a día de hoy, Fernando Llorente es pieza indispensable para el Atheltic. El problema es que el delantero rojiblanco sufre un esguince leve en el ligamento lateral interno de la rodilla, producido durante el encuentro frente al Mallorca, pese a lo cual jugó los noventa minutos frente a los isleños.

Una circunstancia que pone bien a las claras la enorme dependencia que el esquema de Caparrós tiene del atacante mundialista, que se agrava todavía más por la ausencia obligada de Toquero, quien sufrió una recaída en su tobillo derecho, además de no haberse recuperado de sus problemas musculares.

El problema es que tentar a la suerte con este tipo de dolencias en una delicada articulación como es la rodilla puede ser una auténtica lotería, en la que el «gordo» se convertiría en una dolencia grave para el futbolista y de consecuencias nefastas para el equipo.

Ante esta tesitura tendrá que devanarse los sesos el técnico utrerano para intentar elegir la opción que mejor defienda los intereses del conjunto vizcaino y para plantar cara con garantías a un contrincante que en los últimos tiempos se mueve como pez en el agua en San Mamés. La estadística es demoledora, de las últimas doce visitas de los culés, sólo en dos ha conseguido imponerse el Athletic. La última un 20 de mayo en el encuentro que cerraba la temporada 2005-06, en el que los rojiblancos ganaron 3-1 .

«Le deseamos lo mejor»

Claro que no todo son contratiempos para los anfitriones. También los invitados tienen un importante problema, si puede ser calificado así en un equipo que seguramente tiene la mejor plantilla a nivel mundial. Messi no estará en La Catedral, lo que es una mala noticia para el fútbol pero también un quebradero menos de cabeza -el más importante- para la zaga local.

Pablo Orbaiz se refirió a esta circunstancia indicando que la baja de la estrella argentina «es un poco mejor para nosotros», pero siempre matizando que «lo importante es que todo el mundo tenga salud y le deseamos lo mejor siempre». En cualquier caso, para el navarro, «jugamos en San Mamés y lo importante es pensar en nosotros mismos, que esté uno u otro enfrente nos debe dar lo mismo».

En su análisis del Barça, el pivote reconoció que es un equipo «al que no le afecta especialmente salir de su campo y que crea muchas ocasiones, incluso cuando parece atascado».