Son Moix, ahora denominado Iberostar, es un estadio propicio para la Real Sociedad de un tiempo a esta parte. Sólo en dos ocasiones de siete han perdido los txuri urdines en la última década, unos números que confirman que la escuadra guipuzcoana se maneja bien en tierras mallorquinas.

La Real ganó allí a comienzos de dicha década -2001/02 y 2002/03- y consiguió empatar en otras tres ocasiones, mientras que las dos únicas derrotas se cosecharon en los años 2004 y 2005. Un desplazamiento favorable, pues, para resarcirse del 3-1 encajado en Iruñea, si bien los de Martín Lasarte se van a encontrar enfrente un rival tan apurado o más, ya que los bermellones sólo han ganado precisamente a Osasuna.

Lo más probable es que para este choque el técnico uruguayo vuelva a tirar de rotaciones, con la más que probable entrada en el once inicial del doble pivote formado por Mikel Aranburu y Diego Rivas, después de que ambos quedaran fuera de la convocatoria que el preparador charrúa elaboró para rendir visita a El Sadar.

Tamudo mantiene la titularidad

Quien también se perfila como uno de los futbolistas que mantendrá la titularidad es Raúl Tamudo. Su momento de forma y la incontestable racha goleadora -tres goles en las tres últimas jornadas- que viene protagonizando confirman al atacante catalán como punta de lanza para medirse al Mallorca.

La continuidad del ex periquito en el once trae consigo que otro de los fichajes de la Real, Joseba Llorente, se vea obligado a esperar su oportunidad desde el banquillo. El hondarribiarra, ya recuperado de sus problemas de espalda, habló al respecto para señalar que «es bueno que Raúl marque porque nos beneficiamos todos».

El delantero vasco, que indicó estar «a tope», pidió paciencia por las voces críticas tras el último encuentro porque «por una derrota no se termina el mundo» y justificó la mala imagen dejada en Iruñea por el «intenso partido» frente al Real Madrid.