En ocasiones veo muertos
«Siempre a mi lado»
M.I. | DONOSTIA
Resulta irrisorio cuando los ídolos juveniles del momento se ponen serios y dicen que van a demostrar que son actores con el correspondiente drama, porque simplemente se trata de buscar la comercialidad en otro sector dentro del gran público a medida que la estrella de turno va cumpliendo años. Zac Efron era consumido por las preadolescentes cuando hacía para Disney «High School Musical», y ahora con el melodrama romántico «Siempre a mi lado» lo será por las quinceañeras en adelante.
Tampoco es que los nuevos rostros traigan otros aires a Hollywood, teniendo en cuenta que «Siempre a mi lado» no deja de ser una variación de la vieja fórmula de éxito implantada por «Ghost».
La diferencia es que aquí el protagonista ve a su hermano pequeño fallecido en accidente, y esa presencia espectral se interpone de alguna manera en su romance con una chica real. Para justificar dicha facultad extrasensorial puede ver a otros personajes muertos, con lo que de paso se crean subtramas y se completa generosamente la hora y media de rigor.
A Zac Efron le falta todavía experiencia para saber que trabajar con actores infantiles siempre es peligroso, y es el pequeño Charlie Tahan el que le come la partida en el papel del difunto Sam. Los cometidos para intérpretes veteranos se los llevan Kim Basinger, como la madre, y Ray Liotta, como el médico que atendió a los accidentados y mantiene su amistad con ellos.
T.O.- «Charlie St. Cloud».
Dirección: Burr Steers.
Guión: Craig Pearce y Lewis Colick, sobre la novela de Ben Sherwood.
Intérpretes: Zac Efron, Amanda Crew, Kim Basinger, Ray Liotta, Charlie Tahan.
Fotografía: Enrique Chediak.
País: EE.UU., 2010.
Duración: 99 minutos.