Como suele suceder en muchos hogares, la presentación en Bilbo del Cuatro y Medio fue el escenario de un momento de tensión por la posesión del mando a distancia, ya que los pelotaris no aceptaron de buen grado que las televisiones pasen a gestionar a su antojo uno de los cinco descansos a los que cada pelotari tenía derecho en cada partido de campeonato.

Como sucede en el baloncesto, Aspe y Asegarce han otorgado a los operadores la posibilidad de parar los partidos con una especie de «tiempo muerto televisivo» según sus intereses publicitarios, restando a los pelotaris un descanso, cuando en el resto de deportes lo que se hace es añadir un tiempo extra.

Pero al margen de lo que para muchos puede no ser más que un detalle en el devenir del juego, lo que más molestó a los pelotaris -el campeón manomanista Martínez de Irujo fue el que más protestó cuando Iñigo Salbidea daba a conocer la modificación del reglamento- fue el hecho de enterarse de este cambio en plena presentación ante los medios, sin haber sido advertidos previamente.

En este sentido, hay que recordar que en la presentación del Parejas se dio a conocer que, siguiendo lo experimentado en el Masters, se suprimía la segunda posibilidad de saque en caso de pasa. Una decisión de mucha mayor transcendencia en el juego que sin embargo no generó semejante revuelo.

«Sobre todo estoy sorprendido porque son pequeños detalles que no pueden ser así. No nos podemos enterar los pelotaris de los cambios que hay en una presentación, sobre todo cuando te pueden repercutir en tu rendimiento. Muchas veces cuidamos mucho los pequeños detalles, somos muy exigentes a veces con tonterías y luego nos enteramos de estas cosas que te repercuten para bien o para mal en tu juego en una presentación como la de hoy. Son detalles que hay que tener en cuenta y los pelotaris estamos para algo», resumió con su habitual saber estar Abel Barriola.

De todos modos, al margen de los momentos de tensión vividos ayer en la Aula de Cultura de la BBK, la incidencia de esta nueva normativa será menor de lo anunciado, ya que visto el cariz de los acontecimientos ETB ha transmitido a las empresas que, de momento, no tiene intención de emplear esa potestad, por lo que sólo tendrá efectos en los partidos del sábado por la tarde emitidos por la cadena Nitro.

Tres debutantes

Esta polémica vino a poner ese punto de picante que parece inherente a la pelota en vísperas de un acotado en el que Asegarce parece partir en clara desventaja, ya que le falta Aimar Olaizola, su mejor baza en esta distancia, y los cuatro cabezas de serie -el campeón Gonzalez, Martínez de Irujo, Titín III y Julen Retegi- pertenecen a Aspe.

De todos modos, cada empresa contará de inicio con el mismo número de representantes, diez por promotora, y cuatro son las novedades que se aprecian en cuanto a nombres. En Aspe, los que causan baja son Asier Berasaluze -que ya no pertenece a la empresa-, y Alberto Ongay, mientras que Abel Barriola regresa tras su ausencia por lesión del año pasado y Aitor Zubieta es uno de los debutantes en la especialidad.

Mikel Urrutikoetxea, cam- peón del torneo de segunda, y el lapurtarra Lemuno, que también entra por vez primera en un torneo de la máxima categoría tras debutar en primavera en el manomanista de Segunda, serían las caras nuevas de Asegarce, que no puede contar con los lesionados Iñigo Leiza y el mencionado Aimar Olaizola.

Lo que no ha cambiado, algo normal tras el éxito de ediciones anteriores y el fiasco del novedoso Manomanista, ha sido el sistema de competición, que vuelve a arrancar con ocho eliminatorias de dieciseisavos de final, que fueron sorteadas ayer mismo.

Conocidos los emparejamientos, al no haber este año ningún tipo de previa, el campeonato arrancará el próximo viernes en el Ederrena de Urretxu, donde el local Aritz Lasa se medirá al debutante Lemuno. En principio y salvo aplazamientos, la gran final se disputará el 12 de diciembre, pero todavía no está decidido su escenario.