Las heridas abiertas el año pasado por la intención de los responsables municipales de restar protagonismo a las cuadrillas que integran Herriko Taldeak se han restañado superficialmente, aunque subyace el interés del Ayuntamiento presidido por Loly de Juan (PSOE) de dar un golpe de timón al exitoso modelo festivo participativo puesto en marcha hace 42 años.

Por ello, las cuadrillas, verdadero motor de los sanfaustos, decidieron que en la edición que comienza hoy iban a portar lazos naranjas en apoyo al modelo festivo actual, aunque los hay que aventuran que optarán por vestimentas de ese color o pelucas. Lo curioso es que el equipo de gobierno PSE-PP pretende hacer frente a esta iniciativa sumándose a ella, lo que no ha sentado bien a los que han oído de voz de los ediles unionistas frases como que los sanfaustos eran «continuistas y anticuados»; su aportación, una disminución del 40% en el presupuesto aduciendo la crisis.

Por tanto, además del ambiente inmejorable que se espera a partir de las 18.00 en los aledaños de la casa consistorial, si las condiciones meteorológicas lo permiten, el naranja predominará en las vestimentas de los cientos de concentrados. Antes de las 19.00, hora del preceptivo txupinazo, será el tiempo de la presentación de los alcaldes txikis, Leire de Blas y Ekain Perrino, de 12 años e integrantes de la cuadrilla Laguntasuna, así como de la popular Eskarabillera.

No faltará el homenaje a los pregoneros, los componentes de Danbolin Txistulari Elkartea, que, a sus 25 años de existencia, delegarán la responsabilidad de llamar a la fiesta a su presidente, Imanol Pagola. Después, el saludo de la alcaldesa, dispuesta a recibir algún que otro abucheo, y, por el contrario, los gritos de apoyo para los representantes de Herriko Taldeak, dispuestos a dejarse la piel, la garganta y hasta la cartera en unos sanfaustos que se prolongarán hasta el domingo 17 de octubre, cuando Eskarabillera parta por los aires.

La bajada no defrauda nunca

A partir de que el cohete detone en el cielo, los componentes de las cuadrillas se esmerarán en animar a los reticentes, si aún los hay, a que se sumen a la fiestas. El orden de la bajada será en esta ocasión el siguiente: Laguntasuna, Txikerrak, Mozkorrak, Aldatxa, Hauspoak, Ontzak, Urbiko Lagunak, Ogeta-Bat, Zigorrak, Basajaunak, Edurre, Zoroak, Txano Gorritxu, Alaiak, Itsaslapurrak y Basatiak, acompañados de fanfarrias, gaiteros y txistularis.

Tras la entrega del premio de El Social a la mejor bajada, acompañada de traca, en Solobarria llegará el tiempo de abrir las lonjas y comenzar a degustar los exquisitos zurracapotes preparados con esmero por las diferentes cuadrillas. Por cierto, éstas quieren agradecer «la colaboración desinteresada» de las personas que año tras año siguen cediéndoles esos locales o poniendo un alquiler simbólico «para que podamos seguir abriendo a pesar de las trabas que nos encontramos».