Eneko Llanos, séptimo, y Virginia Berasategi, cuarta, no pudieron subir al podio en la prestigiosa Ironman de Hawaii que se disputó en la madrugada del sábado al domingo en la isla de Kona, coincidiendo con el primer sábado de luna llena del mes de octubre.

A pesar de no poder cumplir el objetivo de subir al cajón, la clasificación de los dos triatletas es más que meritoria, teniendo en cuenta que se trata de una de las pruebas más duras que existen en el deporte con 3,8 kilómetros de natación entre las olas del Océano Pacífico, así como 180 kilómetros de ciclismo y 42,195 de carrera a pie a través de un difícil terreno cubierto de lava donde siempre aprieta el calor y la gran humedad ambiental.

Los vencedores, ambos australianos, fueron Cris McCormack, con un tiempo de 8h10.37 a sus 37 años, y Mirinda Carfrae, con una marca de 8h58.36. McCormack, que marcó el séptimo mejor tiempo de la prueba hawaiana por delante del alemán Andreas Raelert, sucede en el palmarés a su compatriota Craig Alexander. La tercera plaza fue para el belga Marino Vanhoenacker.

Mientras tanto, Carfrae superó a la suiza Caroline Steffen con la cuarta mejor marca de la prueba para tomar el testigo de la británica Chrissie Wellington, la gran favorita de la carrera femenina que dio la sorpresa con su ausencia cuando su triunfo se daba ya por hecho. La británica Julie Dibens completó el podio.