El vecino de Donostia, Igor Alvarez, fue arrestado e ingresado en la cárcel de Martutene en junio de 2009 para cumplir una pena de prisión de dos años. El movimiento pro amnistía alerta de que desde entonces lo han cambiado de prisión seis veces y denuncian que «los traslados son otra cara de la política de dispersión y que buscan la inestabilidad del recluso».

Así, el preso donostiarra tras ingresar en Martutene, fue llevado a Daroca y posteriormente a Villanubla el 31 de diciembre de 2009. En abril lo trasladaron a Valdemoro donde estuvo un mes, ya que después fue llevado a Alcalá-Meco y en julio de nuevo a Villanubla. En esta última cárcel ha permanecido en régimen de aislamiento durante dos meses, y ahora ha sido enviado al centro penitenciario de Castelló II.