ELA rechaza la privatización de determinados servicios públicos que el Gobierno de Miguel Sanz ha puesto sobre la mesa con el Plan Moderna, que habilita una fundación para hacer «los deberes que le corresponden a la Administración pública». Denuncia que en este acuerdo están todos «desde el Opus Dei hasta UGT y CCOO».

Mitxel Lakuntza, responsable de ELA en Nafarroa, explicó que el «Plan Moderna no pretende cambiar el modelo económico de Nafarroa, sino fomentar el negocio mediante la privatización y, a la vez, aumentar la cota de gestión privada de los recursos públicos».

Lakuntza explicó que es un nuevo paso «en el desmantelamiento del sector público. Se plantea desviar recursos económicos asignados ya a partidas públicas a una fundación privada, haciendo una falsa propaganda al alardear de que el Plan Moderna no tendrá coste».

Por último, ELA criticó a UGT y CCOO «que han asumido ese plan de Sanz dejando a un lado la defensa de los intereses de la clase trabajadora para alinearse con una estrategia que da cobertura a las políticas neoliberales».