NBA
Los Angeles y Miami «James», los mejores en el arranque
La primera semana de temporada regular propone a los actuales campeones, Lakers, a los reforzados Heat y a los afinados Hawks como referentes.
Izkander FERNÁNDEZ
La vida sigue igual, o casi. A excepción del nuevo panorama que se puede observar esta temporada en la cálida Miami, los grandes del año pasado parece que serán los mismos grandes para este año. Serán pocas las novedades reseñables en los primeros puestos de ambas Conferencias y se puede apuntar con seguridad que Lakers, Mavericks, Hawks, Celtics, Heat y Magic serán quienes obtengan las mejores posiciones a mediados de abril.
Los actuales campeones y su archienemigo para esta temporada. Como si de un cómic se tratase, los focos se están centrando en los Lakers de Los Angeles y en los remozados Miami Heat en este arranque liguero. Pero este tratamiento es tan injusto como incierto, ya que hay otras franquicias, sobre todo en la Conferencia Este, con posibilidades reales de desbancar a la franquicia californiana del trono que lleva ocupando los últimos dos años.
Gasol, ahora sí
Los Lakers han echado a andar con un rotundo balance de tres victorias por ninguna derrota. Y lo han hecho de una forma convincente aunque la calidad de sus rivales ha sido dispar. Comenzaron en casa ante unos Houston Rockets venidos a menos a los que derrotaron por 112-110. Phoenix Suns fue la segunda víctima de los de Phil Jackson con una victoria a domicilio por 114-106. En la noche de Halloween llegó el tercer punto positivo de los Lakers gracias a una contundente victoria ante Golden State Warriors por 107-83.
Pau Gasol y Kobe Bryant, en ese orden, esta vez sí, están siendo los principales motores de los Lakers. El ala-pívot catalán, solo en la pintura angelina ante una nueva lesión de Andrew Bynum, está firmando 25,3 puntos, 10,3 rebotes y cinco asistencias por partido mientras que el escolta se mueve por ahora en unos guarismos de 24 tantos, 6,3 rechaces y 4 pases de canasta por encuentro.
¿Nuevo tridente?
Los renovados Miami Heat comenzaron con derrota (88-80) en la cancha de Boston Celtics. Tras la llegada a Florida de LeBron James y Chris Bosh los paralelismos con lo ocurrido en Boston hace escasas temporadas son amplios. Al igual que los Celtics, los Heat han tirado de talonario y trabajo de despacho para atraer a la estrella más rutilante del firmamento NBA, además de uno de los jugadores interiores más cotizados de la liga. Esto, además del comportamiento, actitud y declaraciones del propio LeBron James, han creado cierto clima contrario a Miami Heat entre aficionados y prensa.
Pero tras la derrota inicial ante los actuales subcampeones, Dwyane Wade, James, Bosh y los suyos han logrado tres contundentes y convincentes victorias ante Orlando Magic, Philadephia 76ers y New Jersey Nets. De momento, Wade y James se han repartido los papeles estelares, con Bosh como secundario de lujo y con Zydrunas Ilgauskas, Carlos Arroyo y Eddie House ejerciendo de actores de reparto al lado suyo.
Fuera de la luz de los focos, Atlanta Hawks son el único equipo del Este que no conoce la derrota mientras que en la Conferencia Oeste New Orleans Hornets y Portland Trail Blazers también permanecen imbatidos hasta el momento.
De momento, la clave de las victorias de los Heat de Miami se asienta en la solidaridad que están mostrando sus grandes estrellas que tiran a canasta casi la mitad que el año pasado.
Luis Scola está sellando números de All Star en este comienzo de temporada con 27,3 puntos y 14 rebotes por partido, pero Houston Rockets no conoce la victoria y suma ya tres derrotas.
En EEUU el deporte es profesional para todo. Nadie puede esperar que alguien sienta algo por unos colores. Esto queda supeditado a los seguidores y nunca a los deportistas. LeBron James abandonó Cleveland dejando a los Cavaliers en la estacada. La franquicia de Ohio se había dejado los cuartos en contentar a James, siempre con el sueño de un anillo en el horizonte. Pero tras millones de dólares desembolsados, James vio la oportunidad en otra franquicia y dio el portazo a Cleveland con una suerte de reality show en el que se documentaba la toma de decisiones que afectaría a su futuro. Al final, LeBron «King» James se decantó por el proyecto de Miami: crear un nuevo tridente junto a Wade y Bosh. Ahora casi todo el planeta NBA mira con desaprobación el movimiento. James pasó a ser uno de los jugadores más odiados cuando siempre había estado entre los más queridos. Profesionales para todo.
I.F.