El Consejo de la Real Sociedad SAD presentará en la Junta General de Accionistas del 1 de diciembre unas cuentas en las que destaca que en un año se pasa de un patrimonio neto negativo de 30,5 millones a uno positivo a efectos de Legislación Mercantil de 27 millones. La explicación radica en la imputación de los préstamos participativos y en que el Consejo incluye como activo en el balance de situación el derecho de uso del estadio de Anoeta por un valor de 25,1 millones.

Una decisión justificada por el cambio del Plan General Contable del 2007 y por el contrato firmado en 1993 entre Anoetako Kiroldegia y la Real para cederle el uso del estadio 40 años por 525 millones de pesetas (3,4 de euros). Entienden que hay una diferencia entre el valor de mercado de ese uso y el del contrato.

Por eso aplican en base a una valoración realizada por un experto independiente que en los 23 años que quedan de explotación hay un valor de 25,1 millones que se puede incluir en el balance. Una práctica contable similar a la realizada por el Racing y que ha sido aceptada por la empresa AGEM Consultores, que ha realizado la auditoría de la Real tras consultar con el ICAF, que es la que marca las pautas contables a nivel estatal.

Para el vuelco radical del balance, la Real también ha necesitado presentar como activo 27,1 millones por los préstamos participativos en los que convirtió su deuda, principalmente con las instituciones, dentro de la negociación del convenio de acreedores en la Ley Concursal.

A estas dos cantidades se suman los 6,5 millones que se presentan como beneficio de la pasada temporada. Los gastos ascendieron a 23,7. El presupuesto de 17 creció por los gastos e ingresos del Centenario, por los 2,5 millones de buena parte de las primas por el ascenso y los 500.000 euros pagados al Mallorca por Nsue por subir y en 1,4 por la continuidad de Bravo y Riesgo, la llegada de Songo'o y la renovación de Griezmann.

Los ingresos alcanzaron sólo los 19,8 -por eso en realidad hubo un déficit de 3,9 y a nivel de tesorería se perdió dinero-, pero el resultado del ejercicio alcanza beneficios porque se imputan como ingresos 10,5 millones de la quita de los acreedores que fueron considerados como gastos en ejercicios anteriores y que deberán ser pagados. Es decir, tanto el recurso contable para alejar en el balance el riesgo de liquidación como los beneficios del pasado ejercicio no suponen ninguna inyección para la tesorería del club ni le dan margen para endeudarse.

El mensaje que trasmitió el Consejo fue de solvencia, porque la formulación del balance aleja el riesgo de disolución, y prudencia porque la tesorería está justa y el club necesita presupuestos que permitan saldar los ejercicios con superavits.

Subida de abonos del 12%

Así la Real someterá a la votación de sus accionistas un presupuesto para esta temporada con unos gastos de 34,9 millones y unos ingresos de 35,9, con una subida en enero de las cuotas de los abonados del 12% y otro medio del club tras el registrado ante el Madrid. Pese a ello, ver en 2011 a la Real en Primera será más barato que en 2007.

Entre los gastos destaca que el coste de salarios del primer equipo supone más de la mitad del presupuesto, 21 millones. Esta cantidad implica un incremento importante por la diferencia de fichas en Primera y Segunda, por variables y parte de la prima del ascenso. También hay 3,5 de amortizaciones por compra de futbolistas y no se contempla ninguna venta. Además, en la Junta se someterá a aprobación la creación de una Fundación para lograr recursos para la cantera de Zubieta.