JUICIO POR EL ACTO DE ANOETA DE 2004
Otegi defiende la «propuesta de solución» ante el tribunal
La de ayer en la Audiencia Nacional fue una vista oral paradójica, ya que los acusados mostraron más interés que el tribunal en explicar los hechos juzgados. Pese a los intentos del presidente por evitar que se hablara de política, Arnaldo Otegi, Joseba Permach y Joseba Álvarez recordaron que en Anoeta sólo presentaron una propuesta de paz que era co- nocida incluso por el PSOE y que sigue abriendo caminos hoy día.
Ramón SOLA | MADRID
Los juicios responden habitualmente a un patrón: un tribunal empeñado en conocer los hechos supuestamente delictivos y unos acusados poco interesados en hablar de ello. Pero ayer en la Audiencia Nacional ocurrió exactamente lo contrario. La prueba más evidente llegó cuando Arnaldo Otegi comenzó a entrar en el fondo de la cuestión. Se le había preguntado qué era aquel acto de Anoeta:
-«En aquel momento había ya una cierta expectativa -explicó Otegi-, y planteamos Anoeta como el lugar donde íbamos a poner negro sobre blanco una nueva posición política, que con- sistía en que...».
-«No hace falta, no se le acusa de eso», le interrumpió el presidente del tribunal.
Jone Goirizelaia, abogada de la defensa junto a Iñigo Iruin, defendió que era totalmente procedente que Otegi explicara eso, pero Fernando García Nicolás se mostró inflexible y zanjó el rifirrafe de este modo:
-«No admito que el acusado nos repita ahora cuál es su ideología política».
Sin embargo, dado que el motivo del juicio no es otro que el acto de Anoeta, las explicaciones de la propuesta no tardaron en volver a aflorar, aunque fuera de modo sucinto. «El objetivo era presentar una propuesta de solución», recalcó Otegi. Se adelantó a las acusaciones para dejar claro que «para nada era una exigencia de ETA, como se plantea en su escrito». Y destacó en concreto que el Foro Ermua traza un relato histórico que sitúa a la izquierda abertzale siempre sometida a la organización ar- mada, frente a lo que le recordó un dato objetivo: «La Alternativa KAS o la Alternativa Democrática las presenta ETA, mientras que la propuesta de Anoeta la presenta la izquierda abertzale, Batasuna en este caso». Insistió en que se trata de una propuesta democrática, que entre otras cosas no exige «concesiones políticas a ETA».
Permach y Álvarez -para los que la Fiscalía pide también año y medio de cárcel- abundaron en ello y reflejaron que los efectos de Anoeta siguen hasta el día de hoy. Quien más lo remarcó fue Permach: «Aquella propuesta fue bien recibida, porque con ella se estaban asumiendo compromisos con las vías políticas y democráticas. Quien más quien menos reconocía los pasos dados. Y en este momento actual no estaríamos en los compromisos de Gernika si no hubiera sido por la iniciativa de los dos ámbitos de negociación. Esa metodología sigue siendo reconocida».
Le siguió Álvarez: «Sin entender que aquel día fuimos a hacer una propuesta de paz, no se entiende nada -se quejó-. La idea era justo la contraria a la del enaltecimiento», dijo en alusión a la acusación que les dirigen Fiscalía y Foro Ermua. Por cierto, esta parte había sufrido un fuerte varapalo ya para entonces, dado que en la fase inicial de las cuestiones previas el tribunal decidió que después de analizar los hechos no cabe acusarles de «desobediencia», «reunión ilegal» ni «quebrantamiento de medidas cautelares». Sólo, por tanto, de «enaltecimiento».
El PSOE también lo sabía
Los tres independentistas pusieron sobre la mesa otro dato que habla claro sobre la realidad de su propuesta: la comunicaron con anterioridad a responsables de otras formaciones con las que mantenían un diálogo en busca de avances hacia un proceso de resolución. Permach apuntó que apenas dos días antes fueron a presentársela al entonces lehendakari, Juan José Ibarretxe. Álvarez añadió que él mismo estuvo difundiéndola después en el Congreso de México, en el Parlamento Europeo o en el italiano, «donde estuvieron en una reunión todos los grupos políticos excepto dos».
Goirizelaia le preguntó a Otegi si el PSOE también conocía la propuesta con anterioridad. «Sí», respondió éste, sin poder aportar más datos, toda vez que el presidente del tribunal ya había dejado caer que esa cuestión tampoco le interesaba. En otro momento, el líder independentista, que sigue preso en Navalcarnero, también recordó al tribunal que aquella propuesta de Anoeta fue valorada incluso por el presidente del Gobierno español y en términos positivos.
No prepararon el acto
Con todo ello, los imputados quisieron poner de relieve el valor político de su iniciativa, y remarcar que estaba muy por encima de los pormenores concre- tos del acto. Por contra, para las acusaciones y el tribunal sólo interesa saber si aquella tarde se escucharon gritos en favor de ETA o se proyectaron vídeos con imágenes de presos y militantes de esta organización muertos. Unas acciones que, además, la defensa recalca que nunca pueden ser atribuibles a los tres imputados.
El presidente del tribunal tomó la palabra en un momento para intentar saber «quién preparó la tramoya» del acto, pero Otegi, Permach y Álvarez le recordaron que ellos sólo eran políticos, en concreto parlamentarios en la Cámara de Gasteiz.
Esta fase de la primera sesión dio pie a algunos momentos jocosos. Por ejemplo, cuando Otegi recordó que en los días anteriores tuvo ya bastante trabajo para preparar su intervención: «Es algo de sentido común. Cuando un presidente del Gobierno o un jefe de la oposición, y no quiero entrar en comparaciones, van a presentar una propuesta política importante, ellos no se preocupan de qué grupos musicales van a tocar en en ese acto». Añadió que además «mis amigos saben que tengo algunas virtudes y defectos, y entre las virtudes no está la de organizar cosas».
Joseba Álvarez también bromeó con que lógicamente el evento incluyó otros elementos, porque «sería insoportable que Arnaldo hablara durante tres horas», e ironizó igualmente con que «si yo tengo que poner las imágenes con un ordenador, pues igual me estoy dos días y no lo consigo».
Permach, por su parte, es señalado por las acusaciones como presentador del acto cuando se limitó a coger un micrófono portátil y, sin subir siquiera al estrado, agradecer la presencia masiva de los independentistas para aliviar la demora en el inicio del acto. «Aquello estaba hasta la bandera», recordó.
Periodistas y policías
En el resto de esta primera jornada comparecieron periodistas que cubrieron el acto de Anoeta y policías que elaboraron atestados. Unos y otros han sido llamados por las acusaciones para sustentar la tesis de que se cometió «enaltecimiento».
Sólo uno de los tres periodistas que declararon -Ángeles Escrivá, de ``El Mundo''- mostró rotundidad al afirmar que se habían oído gritos en favor de ETA. También dijo que sabía que el acto era de Batasuna, lo que le llevó al presidente del tribunal a preguntarle directamente si estuvo presente «cuando se firmó el contrato de alquiler». Tras ello, las acusaciones renunciaron al resto de periodistas.
En cuanto a los agentes policiales, dos ertzainas admitieron que habían elaborado su atestado sin estar siquiera en el Velódromo, únicamente en base a noticias de prensa e imágenes de televisión. Un tercero, de la Policía española, afirmó que hubo gritos de «gora ETA militarra» y se repartió ``Zutabe'', pero no supo explicar por qué entonces no hizo un informe: «No era mi competencia», alegó. Dos guardias civiles añadieron que vieron esos ``Zutabe'', pero sin recoger ninguno: «Con 15.000 personas allí, el operativo no era posible».
Otegi dijo recordar que se emitieron imágenes de compañeros de militancia política muertos por la guerra sucia. Citó a Santi Brouard, Josu Muguruza, Tomás Alba y Mikel Arregi. Permach añadió que ayer era el aniversario de este último, edil en Lakuntza.
Arnaldo Otegi fue llevado a la sala esposado tras llegar desde Navalcarnero. Al desatarle pudo abrazar a Permach y Álvarez, y saludar, con gestos, a representantes políticos, sindicales, sociales, familiares y amigos que viajaron a Madrid para arroparle. Desde Elgoibar, 230 personas le apoyaron con una manifestación.
R. S.
La defensa incorporó en la sesión de ayer un nuevo testigo: el periodista Gorka Landaburu. La novedad dio que hablar después de que se difundieran fotos de una reunión entre Goirizelaia, Jesús Eguiguren -también testigo- y Landaburu.
«La idea del acto era justo la contraria del enaltecimiento, fuimos a Anoeta a presentar una metodología para la paz»
«En los días siguientes, ni en los políticos ni en los telediarios nadie identificó aquello como un acto de enaltecimiento»
«Una propuesta de paz no es lo mismo si se presenta en una rueda de prensa, necesitaba esa fuerza y calor de la gente»
«La metodología de los dos ámbitos está reconocida. Sin eso ahora no estaríamos en los compromisos de Gernika»
Joseba Permach, Joseba Alvarez eta Arnaldo Otegi politikari abertzaleak ez ziren bakarrik izan atzo Madrilgo auzitegi berezian euren aurka izan zuten epaiketaren lehen egunean. Besteren artean, ezker abertzaleko ordezkaritza izan zuten alboan, hala nola Rufi Etxeberria, Niko Moreno, Miren Legorburu eta Iñigo Balda, baita Euskal Herriko alderdi politiko eta sindikatu abertzaleetako ordezkariak ere. Zehazki, Madrileko Auzitegi Nazionalean atzo eta gaur egiten ari diren epaiketan Eusko Alkartasuneko, Aralarreko, Abertzaleen Batasuneko, Alternatibako, ELAko eta LABeko ordezkariak izan ziren.
EAko idazkari nagusi Pello Urizarrek, auzitegi espainoleko atarian, prentsaren aurrean egindako adierazpenetan salatu zuen hiru politikari independentiston aurkako epaiketak berak «Euskal Herrian dagoeneko martxan den bake prozesua blokeatzeko eta trabatzeko asmoa» duela, eta «Euskal Herrian bake eta normalkuntza prozesuaren aldekoak eta sustatzaileak diren pertsonak» epaitzen ari direla. Horregatik, eragile ezberdinei deia egin zien «arduraz joka dezaten», Euskal Herrikoaren gisakoak izan diren prozesuetan «lagundu zezaketen pertsona guztiei lan egiten utzi baitzaie»; euskal gizarteak hori eskatzen duela gaineratu zuen.
Aralarreko koordinatzaileorde Jon Abril ere Madrilen izan zen atzo, ELAko Adolfo «Txiki» Muñoz idazkari nagusia, Alternatibako Oskar Matute eta ABko Mertxe Kolina ere bai. Jon Abrilen esanetan, epaiketa «ezerezean gelditzea espero dugu, justizia egitea eta herri honetan politikagintzan aritzea eta bakearen alde lan egitea inorentzat delitu izan ez dadila».
«Demokrazia batean ideia guztiak demokratikoki defendatzeak posible izan behar du», gaineratu zuen Aralarreko ordezkariak, eta konfiantza agertu zuen, egun irekitako bidetik etorriko diren garai berrietan, gisa honetako epaiketak betiko desagertuko direla.
Ildo berean, ezker abertzaleko kide Miren Legorburuk gogora ekarri zuen Auzitegi Nazionala «frankismoaren oinordekoa den instituzio antidemokratikoa» dela, eta bertan epaituak direnak «Euskal Herrian eragile politiko guztiek barneratu zuten Anoetako proposamena, bake proposamen bat» aurkezteagatik auzipetu dituztela.
Hala, Otegik, Permachek eta Alvarezek epaileen aurrean esan bezala, Anoetako proposamenak egungo prozesu demokratikoaren abiatzean segida izan duela nabarmendu zuen, eta epaiketa ezerezean gelditzea espero duela, lan politikoagatik baitira epaituak.
Abertzaleen Batasuneko ordezkari Mertxe Kolinak, bestalde, epaiketaren ondotik justizia izan dadila galdegin zuen galdera bat eginez: «Justiziak bakea espetxeratu nahi al du?». GARA