Un funcionario municipal y catorce ciudadanos marroquíes fueron detenidos por la Policía española en Nafarroa, Elx, Soria, Barcelona y Murcia en el marco de la desarticulación de un grupo dedicado a la falsificación de documentos y favorecimiento a la inmigración ilegal.

Las investigaciones se iniciaron en julio cuando la Policía española detectó en Tutera un incremento de solicitudes de Permiso de Residencia y Trabajo presentado por ciudadanos marroquíes. La red, que llegaba a cobrar hasta 10.000 euros por un certificado de empadronamiento, pudo ser detectada debido a un análisis realizado a los expedientes instruídos, que desveló que uno de los documentos exigidos para su tramitación, en la mayoría de los casos, estaba expedido por un ayuntamiento en concreto que no destaca por su gran población de ciudadanos marroquíes.

Tras los registros se apreció un desfase de 53 inscripciones existentes en el sistema informático pero no en el manual. Además, se comprobó que los afectados no habían residido en el municipio. Así, la Policía se centró en investigar a las personas que podían tener acceso al sistema informático municipal. De este modo dieron con un antiguo empleado, ya jubilado, que frecuentaba su antiguo centro de trabajo y utilizaba los ordenadores con la excusa de realizar consultas personales.

Las inscripciones se llevaban a cabo a petición de un ciudadano marroquí, que se encargaba de ponerse en contacto con ciudadanos de su nacionalidad para ofrecerles el certificado a cambio de 10.000 euros.

36 de los certificados fueron utilizados para documentar solicitudes de Permiso de Residencia y Trabajo.