La Junta Electoral Central decidió anoche ratificar la decisión de la Junta Provincial de Barcelona y no autorizar el «cara a cara» en la cadena autonómica catalana TV3 entre los candidatos de CiU, Artur Mas, y PSC, José Montilla, a la presidencia de la Generalitat al considerar que el debate no había sido solicitado en los plazos legales previstos, informó Efe.

La decisión fue adoptada sólo noventa minutos antes de la hora prevista para el arranque de la emisión del debate y, con ella, el órgano supremo para arbitrar los procesos electorales confirmó definitivamente que no se podría celebrar el "cara a cara" entre Montilla y Mas, programado para las 22.45.

El PSC y CiU habían acordado este debate el lunes con TV3, un acuerdo que fue recurrido por PP, ERC y Ciutadans, que denunciaron que no se habían cumplido los plazos legales, argumento estimado por la Junta de Barcelona, y que no respetaba el principio de igualdad.

Ante la negativa del órgano provincial a que se celebrase el debate televisivo, CiU y PSC apelaron a la Junta Electoral Central, que horas después confirmó que no habría debate a dos en la cadena pública catalana poniendo punto final al mortificante culebrón del «cara a cara» entre Mas y Montilla.

Hasta última hora del domingo, nada hacía prever que la presencia de Artur Mas y José Montilla en sus respectivos mítines programados para ayer -CiU, en Lleida, y PSC, en Tortosa- acabaría saltando por los aires.

Fue entonces, en el último suspiro del debate en TV3 entre los seis candidatos a la Generalitat, cuando el aspirante del PSC a la reelección retó a su gran rival a un «cara a cara» de urgencia, antes de que el viernes finalice la campaña electoral, y Mas recogió el guante.

Descartado celebrarlo esa misma madrugada, sin salir del plató de TV3 en el que se encontraban, CiU y PSC se pusieron de acuerdo para retransmitirlo ayer por la noche, opción que la propia Corporación Catalana de Medios Audiovisuales avaló, pero que fue recurrida por ERC y PPC, celosos del protagonismo de los dos grandes partidos.

Ayer por la mañana nadie amaneció con la certeza de que el debate iba poder celebrarse; tampoco nadie estaba seguro de lo contrario, había que esperar la decisión de la Junta Electoral Provincial de Barcelona, que elevó el recurso a la Junta Electoral Central en Madrid, que devolvió la patata caliente a la junta barcelonesa.

Sobre las tres de la tarde se supo que la Junta Electoral Provincial había optado por no autorizar el debate, por lo que CiU y PSC recurrirían la decisión a la Junta Electoral Central, que finalmente no lo permitió.