Baloncesto Liga ACB
Un trámite prescindible con premio
El Baskonia, con un gran Stanko Barac, se limitó a no tropezar ante un débil Menorca y se encontró con el liderato en solitario.
C. LABORAL BASKONIA 79
MENORCA BASQUET 61
Jon ORMAZABAL
El liderato en solitario que derivó de la derrota del Real Madrid en Canarias y el galardón de MVP para Stanko Barac fueron las sorpresas en modo de premio que deparó una jornada de baloncesto absolutamente prescindible. Y es que, tras las exigentes citas ante Barcelona y Maccabi, la gélida matinal del domingo presentaba un trámite ante un Menorca que tendrá problemas para mantener la categoría. El Baskonia se limitó a no tropezar, sin que nadie aprovechara la oportunidad para ajustar esos mecanismos que todavía chirrían en muchas de las citas importantes.
Pese a la bonanza del marcador durante mucho tiempo, el protagonismo y el balón volvió a concentrarse en Stanko Barac y San Emeterio, con sitio también para Huertas en el último cuarto, lo que da más que de sobra ante rivales como el de ayer, pero para citas como las que se avecinan, especialmente en Euroliga, se necesita que Oleson y Logan consigan una regularidad que no terminan de alcanzar y, sobre todo, que Barac y Teletovic consigan relevos de garantías. Haislip debe ser la primera opción, pero ayer hizo poco más de cinco faltas en 9,39 minutos de juego, mientras que Bjelica -jugando de cuatro- y Musli se confirmaron como opciones residuales y de urgencia.
Así las cosas, Stanko Barac volvió a ser el termómetro baskonista y el equipo no tuvo problemas en cuanto pudo imponer su ley. A alguien debió olvidársele encender la calefacción y el partido arrancó como la mañana, helado. Pese a la ausencia de Donaldson en Menorca -jugó pocos minutos tras su viaje relámpago a Estados Unidos-, Barac no era capaz de imponerse en el interior y se intentó solucionar desde el exterior, con porcentajes similares a los del jueves en Tel Aviv. Afortunadamente, el rival que estaba enfrente está a años luz del Maccabi y el primer cuarto terminó con ventaja visitante por un punto tras canasta de Rafa Huertas 15-16.
Tras otro par de minutos de zozobra, el encargado de ejercer de termostato fue Stanko Barac. Tras los minutos de banco a los que se vio sometido en el primer cuarto, el croata puso en marcha las calderas, empezó a hacerse fuerte en la zona y eso bastó para que el equipo comenzara a sentirse algo más cómodo en la cancha. El Baskonia ajustó su defensa y con el pívot de principal estilete y un juego más equilibrado en el que hasta apareció el tiro exterior, pegó un arreón con un parcial de 20-4 y presentarse en el descanso con una renta de diez 40-30.
Técnica a Teletovic
Tras una primera parte muy fría, el partido se calentó prácticamente sobre la bocina, con una técnica a Teletovic, después de que los árbitros no señalaran una clarísima falta en la que incluso peligró la integridad física del bosnio. El incidente pareció espolear al capitán y con él a todo el equipo. El Baskonia metió una marcha más larga para abrir hueco en el marcador y dejar sentenciado el partido en el tercer cuarto (63-46).
Sin embargo, el instinto acabó ahí. Mientras Paco Olmos se marchó relativamente satisfecho porque su equipo supo resistirse a recibir otra paliza de 40 como la que se llevó del Palau, en el Baskonia se limitaron a dejar pasar los minutos sin que nadie osara a dar un paso adelante. Huertas y Ribas fueron de lo único pasable en un último cuarto prescindible.
Taldea sailkapenaren buruan bakarrik geratu zen arren, Dusko Ivanovici ez zitzaion batere gustatu bere taldeak atzo Menorcaren aurka eginiko partida. Baskoniaren joko eskasa justifikatzeko zenbaitek osteguneko partidaren nekea, asteazkenean datorrenaren garrantzia edota Menorcaren aurkakoan jokalariak mentalizatzearen zailtasuna erabili zituzten, baina hauek guztiak ez dute baliorik Montenegrokoarentzat. «Aitzakiak bilatu nahi baditugu, milaka daude, baina badakigu bi lehiaketa direla eta ez daukagu hau onartzerik», adierazi zuen entrenatzaileak.
«Jokatu eta irabazi beharreko partida bat zen, baina hortaz harago, egin ez ditugun beste gauza batzuk egin beharreko partida ere bazen, animo eta intentsitate gehiagorekin jokatu beharrekoa. Irabazi dugu, baina ez nago pozik. Bi edo hiru egunetan partida garrantzitsuak ditugu eta horietan jokalari guztiek erakutsi behar dute euren nortasuna eta klub honekin duten konpromisoa», esplikatu zuen Ivanovicek.
Taldeak berrogei minutuetan akats gehiegi egin zituen Ivanovicen iritziz, nahiz eta garaipena ez zen sekula arriskuan egon. «Ez dugu izan pazientziarik, ez dugu ondo defendatu eta 13 baloi galdu ditugu etxetik kanpo defentsan oso oldarkorra ez den taldearen aurka», gaineratu zuen.
Bartzelonaren eta Maccabiren aurka jokatu ostean, Menorca bezalako talde apal baten aurka jokatu beharra jokalariek lasaiago hartu dutela pentsa liteke, baina Baskonian horrek ez du balio. «Espero dut ez dela hala izan. Benetan sinistu nahi dut jokalariek ez dutela halakorik pentsatu izan», gaineratu zuen.
J.O.