comparativa Fernando Llorente y Natxo Monreal
Los más deseados cumplen sin lucir
Ambos internacionales disputaron todo el partido, no brillaron especialmente, pero ejecutaron los papeles que tenían previstos.
Natxo MATXIN
Son ahora mismo dos de los jugadores más codiciados a nivel europeo y, aunque ayer no destacaron en demasía, sí que cumplieron con sus respectivos cometidos. Más en la primera parte que tras el paso por vestuarios, Fernando Llorente generó peligro con su juego aéreo y Natxo Monreal cerró su banda, pese a que le tocaron parejas de baile complicadas enfrente, como Susaeta o Muniain.
Cada uno en su apartado, los caminos futbolísticos de ambos se entrecruzaron de manera física en el minuto 43 cuando el delantero rojiblanco remató un saque de esquina de cabeza y el de Eskirotz sacó bajo palos con Ricardo ya batido. Fue el culmen de la labor de atacante y lateral, cada uno defendiendo sus intereses.
Quizás en el caso del goleador le fueron pesando los minutos por la gastroenteritis sufrida entre semana y únicamente pudo sacar algunos de sus ramalazos ofensivos en la primera mitad. La buena labor de Sergio y Miguel Flaño alternándose en el marcaje del internacional también tuvo mucho que ver en su menor presencia.
Curiosamente, en esta comparativa entre ambos futbolistas, no fue el ariete el primero en rematar a portería, pese a su idónea posición. A los 11 minutos, Monreal, llegando desde atrás, ya había tenido la posibilidad de adelantar a Osasuna de cabeza, pero el recién renovado Iraizoz estuvo soberbio en los momentos clave. Con razón, el defensa se lamentó de una oportunidad que pudo variar el discurrir del derbi.
Llorente replicó en los minutos posteriores, encadenando toda una serie de ocasiones en la fase de mejor juego y aparición del pichichi rojiblanco. Un primer disparo que se marchó arriba (m.14), una jugada individual por hacerse un hueco en el balcón del área perdiendo finalmente la pelota (m.22), un segundo remate con la testa tras una falta en medio campo (m.29) y un giro forzado con la cabeza tras centro de Toquero fueron el preámbulo al lance mencionado del 43.
Tras el vestuario, a menor ritmo
Mientras eso ocurría, Monreal ya hacía rato que había echado el cerrojo a su parcela. Por su banda el Athletic no encontraba vía alguna y Susaeta estaba desaparecido, hasta el punto de que fue el primer cambio de Caparrós. Cumplida la primera faceta que se le debe exigir a un lateral -ser fuerte defensivamente para evitar que su par penetre por el carril y centre al área-, el rojillo también se prodigó, a intervalos, en ataque. Dio algún que otro centro y casi todas las faltas generadas por la izquierda las sacó él.
Sin embargo, el gran despliegue físico de la primera mitad pasó factura en la segunda. Ni uno ni otro estuvieron tan activos a la hora de colaborar con el equipo. Llorente, por los recientes y ya citados problemas estomacales, apenas inquietó a la zaga navarra y Monreal optó por ser más conservador a medida que el encuentro se iba acercando a su finalización. El «9» del Athletic sólo despertó de su letargo en el 81 cuando, casi en parado, trató con su frente de desviar la trayectoria del cuero hacia las redes rivales, pero se le marchó arriba.
Llorente terminó inédito, pero con la satisfacción de saborear tres valiosos puntos in extremis y Monreal con la conciencia tranquila por el deber cumplido, pero con la amargura de no enmendar la mala trayectoria foránea.
Fernando Llorente no pudo dar continuidad a su racha goleadora de las últimas jornadas y acabó sin anotar. El marcaje de Sergio y los problemas físicos de entre semana le acabaron pasando factura.
Natxo Monreal fue amonestado en el minuto 58 cuando intentó frenar una salida del Athletic. El árbitro dio la ley de la ventaja, pero poco después sacó la amarilla al lateral zurdo de Eskirotz.
MONREAL
LLORENTE
Minutos jugados
Pases acertados
Pases errados
Faltas recibidas
Faltas cometidas
Tarjetas
Centros
Remates
Goles
90 90 15 17 8 12 2 0 0 1 0 1 0 6 4 1 0 0