LAB valoró ayer en Bilbo el nuevo proyecto de la izquierda abertzale, y lo hizo después de que su Comite Nacional llevase a cabo una reunión extraordinaria para analizar la iniciativa que se presentó el sábado en la capital navarra. «La clase trabajadora vasca tenemos no sólo la necesidad, sino la urgencia de un proyecto de estas carácterísticas», subrayó Jabi Garnika, secretario general adjunto, que junto a Ainhoa Etxaide, la secretaria general, se encargaron de hacer pública su lectura.

«La clase trabajadora necesitamos que las cosas cambien y las cosas pueden cambiar si el camino a recorrer es el de la construcción de otra Euskal Herria distinta. Reclamamos -enfatizó Garnika en su intervención- a este nuevo proyecto que haga ese camino dando los pasos necesarios para superar las limitaciones actuales y que se convierta en el instrumento para el cambio político que promueva el verdadero cambio social que necesita la clase trabajadora».

Etxaide añadió que la iniciativa de la izquierda independentista no llega en un momento cualquiera. «Llega cuando estamos construyendo un proceso democrático que lleve a cabo ese cambio político, un proceso sin exclusiones en el que -dijo la líder de LAB- se respeten los derechos humanos, civiles y políticos pero también los derechos nacionales que corresponden a Euskal Herria».

Ainhoa Etxaide defendió que la izquierda abertzale quiere avanzar en su estrategia hacia la independencia y el socialismo por vías políticas y democráticas. «Y ante esto -remarcó- no hay argumento válido en términos democráticos para detenerlo. Necesitamos que el conflicto se resuelva de una vez y el pueblo vasco no puede permitir que se arrebate la oportunidad de solucionarlo democráticamente, ni que ello se posponga por que se prioricen otro tipo de objetivos».

A renglón seguido, instó al Estado a que emplee las mismas vías democráticas que la izquierda abertzale, si lo desea, «para detener las ansias y la voluntad de independencia de este pueblo. Si quiere seguir defendiendo un proyecto basado en la negación de Euskal Herria, que tome ya la decisión de hacerlo por vías pacíficas y democráticas». Recordó que, en otras oportunidades históricas, los gobiernos «han respondido a la necesidad de soluciones y al ansia de libertad de este pueblo mediante la negación».

Así, Etxaide manifestó que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero tiene la oportunidad de actuar en otra dirección «y esperamos que la aproveche». Después, declaró que la izquierda abertzale con su nuevo paso ha puesto en manos de la sociedad vasca la oportunidad de superar obstáculos y limitaciones que le impiden su derecho a decidir, y lo hará a través de «vías exclusivamente democráticas para dar la vuelta a esta situación antidemocrática».

Ante este análisis, LAB tiene claro que la apertura de un nuevo escenario no puede demorarse más. «Queremos que en Euskal Herria todas las ideas políti- cas se encuentren representadas, que todos los proyectos puedan confrontar con los mismos derechos y en igualdad de oportunidades, compitiendo entre ellos según las reglas de juego democráticas y queremos verlos trabajando en pos de objetivos que sean factibles, sin impedimentos ni límites impuestos», argumentó su secretaria general, arropada por el resto de integrantes del Comité Nacional del sindicato.

No perdió la ocasión de subrayar que para dar por superado la etapa de bloqueo la aportación dada a conocer el sábado en Iruñea «es determinante». De ahí que la central abertzale anunciase que va a realizar un llamamiento especial a la clase trabajadora vasca «para que se implique en la reivindicación del derecho a la participación política legal y normalizada de este nuevo proyecto».