No está viviendo un momento cómodo el Bizkaia Bilbao Basket. Dudas en el juego y en varios jugadores, altibajos continuos... El triunfo ante Granada parece haber calmado las aguas, pero por si acaso, Katsikaris avisa: «Es el momento de ver qué jugadores están preparados mentalmente».

Tras dos derrotas, llegó la victoria en Granada. ¡Menos mal!

Es verdad. Cuando pierdes, pesa mucho en la autoestima y en el trabajo. Ganar ese partido, sobre todo poque ganar fuera en la ACB te marca tu destino, fue importante, especialmente en este momento en que estábamos bajos de confianza y con problemas en nuestro juego. Superamos esos problemas en Granada y espero seguir como en la segunda parte de allí.

Los pívots y Chris Warren están pasando un mal momento de juego y usted ya adelantó un «cambio de planes». ¿En Granada le funcionó el «plan B»?

Puede ser. Comentaba lo del cambio de planes porque llevábamos varias semanas con las mismas dudas, las mismas preguntas y respuestas... Era un momento para reaccionar, para ver qué jugadores están preparados, sobre todo mentalmente, sabiendo cada cual lo que debe hacer, sin dudas.

Ahora no hay tiempo de volver atrás, de pensar, de hablar de nuevo... Los jugadores tienen claro lo que deben hacer. Si debemos hablar de algo es de baloncesto colectivo. Es el momento de la verdad. Hablar te puede ayudar, pero a partir de cierto punto, es sólo actuar.

¿Lo dice por Warren, que sólo jugó 5 minutos en Granada?

Chris es una gran persona y un gran profesional. Pero no sé por qué tiene esas dudas. He pasado mucho tiempo explicándole lo que ha de hacer, su rol... y al final vemos que sigue jugando con dudas. Para nosotros, resulta un jugador caro; tiene ya 30 años y no es ningún niño. Si tengo que hablar cinco veces con Jackson, que es un jugador joven sin experiencia en la ACB, lo haré, pero con Chris no puedo hablar todos los días. Estoy esperando la reacción de Warren, porque depende de él.

Por otro lado, con la llegada de Fisher hay tres bases. ¿Pero Jackson y Rodríguez no son jugadores que necesitan muchos minutos para rendir?

Podría ser, y también podríamos decir lo mismo de Warren. De hecho, éste es uno de los debates en su cabeza. Nuestro objetivo es ser grandes algún día. Por eso, yo mantengo a los jugadores en la pista cuando rinden. No hago cambios porque sí, ni tengo un cronómetro en el banquillo. Estarán los jugadores que hagan funcionar al equipo, y los que salten del banquillo deben ser conscientes de que han de hacer un trabajo mejor que los que están en la pista. Ése es el camino si quieren mejorar.

Por otro lado, yo siempre he sido partidario de tener a tres bases, pero no bases parecidos. No diré que Jackson y Rodríguez son iguales, pero sí tienen cosas similares. Fisher nos viene bien porque es distinto; es un jugador que nos conoce y que conocemos, es inteligente y puede jugar de base y de escolta.

En la última jornada se vio un ataque más equilibrado, buscando más balones interiores.

Tal y como está estructurado el equipo, los exteriores pueden generar muchas cosas para los interiores. Entonces, si los pívots son rápidos y hacen buenos bloqueos y continuaciones, el equipo generará para ellos. Somos un equipo de los que más veces lanza de dos puntos -el sexto, por detrás de Menorca, Joventut, Valladolid, Barcelna y Cajasol-. Eso significa algo: que nuestro juego depende de la velocidad, el espacio, el uno contra uno... y el propio juego interior depende de esos factores. Últimamente, Mavroeidis y Sonseca no están bien; ahí tenemos un problema. Pero Banic siempre está y hemos recuperado a Hervelle. Queremos insistir en buscar ese equilibrio.

Ante todo, usted se queja de los altibajos de su equipo.

Es importante equilibrar nuestro juego. No nos gustan esos altibajos y no buscamos excusas. Es un tema en el que debemos insistir más, sobre todo en algunos detalle importantes, como ajustar la defensa colectiva, controlar el rebote y el balón en defensa, y en ataque, evitar la relajación si conseguimos ventajas importantes, o perder balones fáciles. Lo que debemos hacer es aprender de esos malos partidos, porque ya no tenemos margen de error.

Hervelle y Jackson destacaron positivamente.

Axel, cuando está bien, nos da una seguridad en nuestra defensa por su agresividad. Jackson, por su parte, es un base anotador que intenta jugar más colectivo. Estamos trabajando para que no tengamos tantos altibajos en los partidos.